Parque Nacional Altos de Campana: características generales

Campana, Panamá

Vista de la Ensenada de Chame desde el área de amortiguamiento del Parque Nacional Altos de Campana. Foto: George Karekides (www.panoramio.com)

Parque Nacional Altos de Campana: características generales

El Parque Nacional Altos de Campana es el primer parque nacional creado en la República de Panamá en el año 1966. Tiene una superficie de 4,925 hectáreas. Está situado en la vertiente oeste de la cuenca del Canal de Panamá. Igualmente este parque está ubicado muy cerca de las costas de Chame y de sus planicies aluviales. Esta área protegida tiene altitudes que van desde los 400 metros hasta 850 metros. El punto más alto se denomina el pico de Campana. El parque tiene una temperatura promedio de 24ºC. Las precipitaciones superan los 2,500 mm por año.

Este parque contiene un paisaje con vistas espectaculares de la cuenca del Canal y de la bahía de Chame, incluyendo todo el paisaje de manglares que domina en esta zona costera.

Campana, Panamá

Su antigua actividad volcánica está reflejada en su abrupta orografía en la que se observan grandes acantilados, campos de lava, tobas volcánicas y otras numerosas estructuras geológicas típicas de volcanes inactivos. Foto: Roly (www.panoramio.com)

Desde el punto de vista geológico Campana es una extensión de la formación ígnea del extinto volcán de El Valle de Antón. Su pasada actividad volcánica está reflejada en su abrupta orografía en la que se observan grandes acantilados, campos de lava, tobas volcánicas y otras numerosas estructuras geológicas típicas de volcanes inactivos.

Una de las importancias estratégicas del parque son los servicios ambientales que provee, como es la protección de la cantidad y la calidad de las aguas de las cabeceras de los principales ríos de la región, como son el Río Chame, Río Perequeté y Río Caimito que desembocan en la Bahía de Chame y el Río Trinidad y sus afluentes que desemboca en el Lago Gatún del Canal de Panamá.

El parque contiene cuatro zonas de vida (Sistema de Clasificación de Holdridge): el bosque húmedo tropical, el bosque muy húmedo pre-montano, el bosque muy húmedo tropical y el bosque pluvial pre-montano.

Debido a las dimensiones relativamente reducidas de este parque, el efecto borde que producen las actividades antropogénicas alrededor y dentro del parque ha provocado impactos ambientales que amenazan los valores naturales del área.

Riqueza biótica

Las partes más altas del Cerro Campana por su aislamiento geográfico se han convertido en una pequeña isla bio-geográfica y en un centro de endemismo. En las áreas más altas del parque son abundantes los musgos y otras plantas epífitas como los bromelias y las orquídeas.

El parque contiene 26 especies de plantas vasculares endémicas de Panamá. En el último censo se han identificado 198 especies de árboles y 342 especies de arbustos.

En el parque se han registrado 39 especies de mamíferos. Es importante destacar al ratón rosillo de bolsa (Lyomis adspersus), que es mamífero endémico de la zona central de Panamá.

Algunas especies de mamíferos comunes en el área son la zarigüeya (Didelphis marsupialis), el gato solo (Nasua narica), el mapache (Procyon cancrivorus), el perezoso de dos dedos (Choloepus hoffmani) y el perezoso de tres dedos (Bradypus variegatus) y el mono tití (Saguinus geoffroyi).

En el parque se ha registrado un total de 267 especies de aves, de las cuales 48 especies son migratorias. De las especies nativas destacan los trogones que destacan por su singular plumaje de colores llamativos, como el trogón ventrianaranjado (Trogon auratiiventris).

El parque también sirve de refugio a otras aves cuyas poblaciones están amenazadas, como el pico de hoz puntiblanco (Eutoxeres aquila), el colibrí ventri-violeta (Damophila julie panamensis) y el calzonario patirrojo (Chalybura urochrysia).

La riqueza herpetológica del parque la componen un total de 62 especies de anfibios y 86 especies de reptiles. Este parque es una delas principales áreas de conservación de la fauna herpetológica en el área central de Panamá. Destacan siete especies endémicas, como la rana dorada, especie llamativa por el color amarillo brillante de su piel. Es considerada una especie rara y está en peligro crítico debido a que casi todas sus poblaciones han sido diezmadas por la plaga del hongo quítrido. Otras especies de anfibios y reptiles endémicos son la salamandra (Bolitoglossa schizodactyla), la cecilia (Caecilia volcani), la lagartija Anolis lionotus, el lagarto Morunasaurus grai, la serpiente Trimetopon barbouri y una serpiente del género Winia.

También se encuentra en el área protegida la rana gigante (Leptodactylus pentadactylus), el anfibio panameño de mayor tamaño, el sapo espinoso (Bufo coniferus) y las ranitas venenosas ventriazul (Dendrobates minutus) y verde y negra (Dendrobates auratus).

Fuente:  Autoridad Nacional del Ambiente (Panamá). Editada por Burica Press