Impactos sociales del proyecto hidroeléctrico Chan 75 en el Bosque Protector de Palo Seco, Bocas del Toro

Impactos sociales del proyecto hidroeléctrico Chan 75 en el Bosque Protector de Palo Seco, Bocas del Toro

A continuación Burica Press reproduce parte de la investigación realizada por el estudiante investigador Jeff Stein, en relación a los impactos sociales de uno de los cinco proyectos hidroléctricos planteados en el Bosque Protector de Palo en la Provincia de Bocas del Toro, Reserva de la Biósfera La Amistad Panamá y área clave del Sitio de Patrimonio Mundial La Amistad compartido como un sola unidad ecológica entre Costa Rica y Panamá.

Para mayores detalles baje el documento adjunto: Impactos sociales del proyecto hidroeléctrico Chan 75 en Bocas del Toro.doc

R�o Changuinola de aguas intactas

Resumen

El proyecto hidroeléctrico «Chan-75,» ubicado en el Bosque Protector de Palo Seco en la cuenca del Río Changuinola, Bocas del Toro, fue aprobado por ANAM en el año 2005 y está actualmente en las primeras etapas de construcción. El proyecto exige la inundación de 750 ha de tierra y la reubicación de alrededor de 1,000 personas de comunidades Ngöbe Buglé, en adición a las fincas y propiedades que pertenecen a moradores de comunidades cercanas. Este informe investiga las percepciones de los moradores, funcionarios de ANAM, y otras personas relevantes, a respeto de los impactos sociales anticipados en las comunidades dentro del área de influencia del proyecto hidroeléctrico. Para entender los impactos sociales, el estudio recoge percepciones a respeto a la participación de la comunidad en el proyecto, y estrategias de mitigación de los impactos negativos propuesto por la empresa promotora y las comunidades afectadas. Los moradores afectados sugerían que no han sido tan involucrados en el proceso de desarrollar el proyecto como querrían, y también que todavía hay mucha confusión sobre el proyecto y el plan de reubicación y especialmente la manera en que van a recibir compensación por lo que van a perder. Impactos sociales anticipados por los moradores y otros incluyen empleo a corto plazo, desempleo a largo plazo, migración acelerada debido a las carreteras, disminución de productividad, aislamiento de familias, pobreza, conflictos de tierra, problemas de salud, disminución de confianza en el gobierno nacional, reforzando las estructuras tradicionales de políticas, inversiones sociales, y efectos de turismo. La empresa promotora y el gobierno nacional ya han hecho algunas medidas de mitigación como donaciones, cursos de capacitación y trabajo social, y ha prometido algunas más como apoya a la agricultura, indemnización de fincas y plantas pérdidas, casas nuevas para los reubicados, consejo financiero, y control de insectos. En adición, la gente afectada ha propuesto algunos beneficios que quieren recibir, pero todavía la empresa no ha cumplido. Mis resultados sugieren que si la empresa promotora proporcionara documentos firmados para asegurar estas medidas propuestas, es probable que disminuiría la oposición al proyecto.

Cuando los tractores rugen en un área protegida

 

 

 

Executive Summary

 

This report analyzes the anticipated social impacts of a hydroelectric project, titled «Chan-75,» in the surrounding communities. The project is located in the Bosque Protector de Palo Seco (BPPS) protected area along the Changuinola River. The flooding of 750 hectares (ha) to create a reservoir for the dam will require the resettlement of roughly 1,000 residents of at least four indigenous Ngöbe Buglé communities including Valle del Rey, Charco la Pava, Changuinola Arriba, and Guayabal, in addition to the submersion of thousands of ha of farmland belonging to residents of nearby communities (Cordero et al). Once completed, the dam will generate 223 MW with a planned operational period of 50 years (Espino).

 

In this study I examine perceptions of past and present dynamics between the project’s promoter (currently AES Changuinola, and referred to as «AES») and local residents, anticipated social impacts, and suggested mitigation measures. I arrive at my conclusions by interviewing 54 residents of 5 different communities, whom either inhabit or possess property within the area affected directly by the project. I also conduct interviews with local leaders, government officials, and other relevant figures.

 

The residents interviewed suggested that the project will have profound and lasting social implications for the resettled populations, as well as the neighboring communities, where many of those displaced may relocate. While some residents identified the potential of the project to facilitate social development in the rural area, the Promoter’s perceived apathy towards the sentiments of the affected communities, perceived ambiguity and deception surrounding the project’s implementation, and delayed delivery of promised benefits, has compounded widespread distrust and disapproval of the project among those living within the project’s area of influence. Residents also voiced confusion regarding resettlement requirements, as AES has promised resettlement within the same general area occupied currently, however, such a plan violates a National Authority of the Environment (ANAM) resolution prohibiting resettlement within the protected area. Anticipated social impacts include: a short term employment boom; long term unemployment; accelerated migration due to resettlement of communities and the installation of roads; diminished security for future generations due to the loss of unrestricted fertile farmland; crowding of communities serving as resettlement centers; sickness due to an influx of foreign labor and facilitated by the reservoir’s function as artificial habitat for mosquitoes and other disease vectors; poverty as a result of inadequate compensation for lost land coupled with the population’s insufficient experience with long-term financial investments; conflicts over land use and ownership; reduced confidence in the national government to represent the interests of its constituents; solidification of local and traditional structures of authority to confront issues associated with the hydroelectric project; investment in education, infrastructure, and social development by the project’s promoter; and the emergence of a tourism sector that may provide jobs and a market for locally manufactured goods.

 

Several of the social implications may be mitigated or avoided entirely if appropriate measures are implemented. While the Promoter has proposed various mitigation strategies, the project’s preliminary status has not yet mandated their execution. Furthermore, as the Promoter has yet to submit its plan for resettlement, analysis of proposed mitigation measures proves especially challenging. AES has already initiated community skills-training courses and educational seminars, donated clothing, provided scholarships, and purchased new farmland for certain residents. However, residents describe such measures as inadequate, and propose guaranteed employment within the company, subsidy and pension programs for the duration of the project, high quality housing, relocation inside BPPS, guaranteed scholarships for their children, investments in new and existing local schools, motor boats to permit transport across the reservoir, electricity, funding for health centers, and public telephones in the relocated communities. Furthermore, they demand signed, legal documents guaranteeing the benefits they are to receive.

 

 

 

Introducción

 

En los últimos años, el interés en los proyectos hidroeléctricos ha aumentado, ya que ellos representan una forma de generar electricidad sin quemar hidrocarburos. Aunque nuevos datos sugieran que en algunos casos, el efecto invernadero del metano producido por hidroeléctricos puede ser mayor que el producido por hidrocarburos (Fearnside 69), las hidroeléctricas son promovidas como una alternativa sostenible y en estos momentos, y proporcionan 17% de la electricidad mundial (Hydropower Report). En total, Panamá tiene actualmente 76 proyectos hidroeléctricos (Cordero et al 18). En el 2005, el gobierno panameño aprobó tres proyectos hidroeléctricos en la cuenca del Río Changuinola, los cuales se llaman Chan-75, Chan-140 y Chan-220, y el Bonyic, ubicado en el Río Teribe que es un afluente del Río Changuinola. Todos los proyectos están planteados dentro del área protegida, Bosque Protector de Palo Seco, excepto del Bonyic, lo cual está ubicada dentro del Parque Internacional La Amistad. Los tres proyectos en el Río Changuinola serán ejecutados por Hidroteribe, un concesionario[1] de AES Changuinola (la empresa promotora, a cual se refiere «AES»), el cual es un subsidio de la corporación global que se llama The AES Corporation. El Promotor de Bonyic se llama Hidroecologico-Teribe y es concesionario de la ciudad de Medellín, Colombia.

 

De los cuatro proyectos, Chan-75, el cual también se refiere como El Gavilán, está lo más avanzado, como ya empezó la construcción de varias estructuras para apoyar la represa. El costo de la implementación de este proyecto es de B/. 158, 000,000 millones. El área que Chan-75 inundará para el embalse será aproximadamente 750 ha (Cordero et al). Dentro y alrededor del sitio de la hidroeléctrica hay varias comunidades, cuyas poblaciones son mayormente indígenas, y se verán afectadas por el proyecto. Los habitantes que están dentro del área de inundación serán reubicados.

 

Hay varios Estudios de Impacto Ambiental (EIA) que explican los efectos anticipados de la hidroeléctrica, pero hace mucho tiempo que fueron publicados, falta incluir muchas perspectivas de los moradores, y no consideran los impactos sociales con mucha profundidad. Si no hay información completa y exacta sobre los impactos sociales de este proyecto, las personas responsables y la población afectada pueden estar desprevenidas para aspectos positivos y negativos, y posiblemente puede sufrir las consecuencias imprevistas. Para promover el conocimiento general e intentar que las comunidades afectadas y las personas responsables de la toma de decisiones estén informadas, investigo percepciones de los impactos sociales del proyecto hidroeléctrico en el área de influencia directa

Revisión Bibliografía

 

 

Las Comunidades del Bosque Protector de Palo Seco

 

El Bosque Protector de Palo Seco (BPPS) fue declarado área protegida mediante decreto 25 del 28 de septiembre de 1983, para servir como una «zona de amortiguamiento para el Parque Internacional La Amistad» (Angehr 114). Hay varias comunidades que están ubicadas alrededor del Río Changuinola y sus afluentes, con poblaciones mayormente de etnias indígenas, y algunos identificados como «Latino» o «Campesino.» Un estudio, hecho por la oficina regional de ANAM, documentó 118 comunidades dentro del área del BPPS (Montano 2). Según el mismo estudio, 58% de las personas entrevistadas participan en actividades agrícolas, 27% se identificaron como «amas de casa,» y 10% se identificó como «jornalero /asalariado» (Montano 5). En promedio, siete personas habitan una vivienda, pero en comunidades como Bajo la Esperanza, Punta Peña, y El Nance, hay instancias de casas en las cuales viven 30 o más miembros (Montano 7). Sin embargo, el estudio indica que sólo cinco personas de las 200 entrevistadas tenían los títulos de sus propiedades. El Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) confirmó que ninguna persona quien vive dentro del BPPS tiene tenencia a la propiedad, y que las viviendas son «sobreentendidos,» o sin derecho legal (Montano 11). En un informe sobre las características socioeconómicas de varias comunidades dentro del BPPS, González enumera las raíces de la mayoría de conflictos: la tenencia de tierra, disposición de la basura, deforestación y la extracción de recursos naturales (36).

 

Las poblaciones en las áreas afectadas por el proyecto Chan-75 son mayormente Ngöbe Buglé. Ellos viven en pueblos pequeños que se llaman caseríos, formados por cinco a diez casas de personas emparentadas. Generalmente, la familia es la forma básica de organización de sus comunidades. Tradicionalmente, los Ngöbe no reconocían puestos políticos, sino a sus caciques, quienes fueron líderes informales, respetados por sus características personales. Desde los años setenta, el gobierno panameño ha promovido puestos más fijos, y la creación de la Comarca Ngöbe-Buglé y en 1997 cambio oficialmente el sistema político al replicarlo del gobierno nacional (Bort & Young 129).

 

 

Impactos Ambientales de las Hidroeléctricas

 

Las hidroeléctricas utilizan la fuerza de gran cantidad de agua, típicamente de un lago artificial o una represa, para girar la turbina de una generadora eléctrica. Ya que las hidroeléctricas exigen una represa, se hace un embalse que controla el agua e inunda la tierra más arriba (http://ga.water.usgs.gov/edu/hyhowworks.html). Este proceso afecta directamente las condiciones ambientales por la deforestación como resultado de la construcción de la represa, líneas de transmisión, y caminos de acceso, y también por disminuir el nivel del río abajo del embalse (De Los Santos). En el caso de los cuatros proyectos en Changuinola, se calcula que el área deforestada será al menos de 2,527 ha de bosque primario y secundario intervenido, e inundará al menos 2158.5 ha de tierra (Cordero et al 26).

 

También, hay implicaciones indirectas que se derivan de los impactos directos. Primeramente, el embalse forma una barrera en donde las poblaciones de peces no pueden pasar, y esto puede interrumpir su migración. Se estima que las estructuras de los proyectos hidroeléctricos en Changuinola pueden erradicar al menos 10 especies de peces y camarones de las represas arriba, y reducir las poblaciones de varias especies más. (Cordero et al 44). Si hay una disminución de especies de peces, habrá un descenso de especies terrestres también, porque muchos animales terrestres, como el gato de agua, dependen de peces y otros animales acuáticos para su alimentación. Además, porque el embalse impide la corriente del río, el agua fría y desoxigenada hunde mientras el agua más tibia sube, resultando en una estratificación del agua. El efecto provoca una aceleración de «eutrofización,» o crecimiento de algas y otra flora que alteran la composición del ecosistema. Esta alteración puede tener implicaciones grandes para la composición de especies en el río, e irradicar los cuales normalmente viven allá (Horrigan). También hay efectos por la contaminación de químicos y otros materiales generados durante la construcción del embalse y consecuentemente la erosión de la tierra (http://www.fwee.org/hpar.html). Finalmente, la deforestación y descomposición anaeróbica (debajo del agua) de materia orgánica produce una cantidad notable de metano, un gas invernadero (Fearnside 69).

 

 

Impactos Sociales de Hidroeléctricas

 

Los proyectos hidroeléctricos no sólo cambian el medio ambiente; también tienen implicaciones para las poblaciones ubicadas en el área. El Antropólogo Paul Gellert escribe que las transformaciones físicas influyen directamente e indirectamente en la organización social, cultural, y en el comportamiento de las comunidades alrededores (3). Refiriéndose a las comunidades de la cuenca del Río Changuinola, Cordero et al afirmen, «Los proyectos hidroeléctricos cambiarán las condiciones de vida de las comunidades afectadas» (27).

 

El impacto social más visible del proyecto Chan-75 será la reubicación de viviendas que están establecidas dentro de la zona de inundación. El EIA menciona el «Proceso de Reubicación» como un impacto negativo que requiere varias medidas de mitigación, como pago por afecciones y construcción de nuevas viviendas con las facilidades públicas básicas (De Los Santos). Sin embargo, todavía falta un plan de reubicación más detallado y actualizado por la empresa promotora (Rodríguez). Indemnización como manera de compensar personas reubicadas ha tenido problemas en el pasado, porque a veces las comunidades indígenas no están muy familiarizadas con la dependencia en dinero. En el caso del proyecto hidroeléctrico Bayano, funcionarios del Promotor aconsejaron a la población reubicada como invertir sabiamente su compensación. «Con frecuencia, estas inversiones no produjeron los resultados anticipados, y en un periodo de tres años, la gente dio cuenta de que sus empresas agrícolas habían fallados, y que habían quedado sin tierra y sin dinero» (Wali 73)[2]. También, la autora añade que parece que una porción del pago fue usada para comprar alcohol.

 

Otros impactos pueden derivarse de la disminución de recursos ambientales. Según el análisis de costo beneficio, «Actualmente, la condición de vida de estas comunidades depende principalmente de los productos agrícolas que cosechen, los animales que crían, la pesca, madera para cocinar y construir, y el agua a su disposición» (Cordero et al 27). Por esto, los autores continúan manifestando, cambios en las cantidades y en los tipos de recursos pueden producir cambios en la comunidad.

 

Pregunta de Investigación

 

¿Cuales serán los impactos sociales en el área de influencia del proyecto hidroeléctrico Chan-75, según las personas involucradas en y afectadas por el proyecto?

Objetivos

 

1. Investigar las percepciones de los moradores en relación a como ellos fueron involucrados en el proyecto.

 

2. Recoger las percepciones de los moradores y de otros grupos en relación a los impactos sociales del proyecto

 

3. Averiguar propuestas de manera de mitigar estos impactos

 

Resultados

 

Cuando se hace un proyecto de tal magnitud como Chan-75, es inevitable que hallan impactos sociales a las comunidades en el área circundante. Porque todavía el proyecto no ha concluido al momento de este estudio, y porque todavía falta una plan oficial de reubicación, solo es posible predecir los impactos que pueden ocurrir, especialmente si no se toman suficientes medidas de mitigación. Antes de examinar percepciones de los impactos sociales, es obligatorio entender las relaciones entre las comunidades afectadas y la empresa promotora. Por esto, empiezo una investigación de las percepciones de moradores, lideres locales, y otras personas relevantes sobre las dinámicas entre la gente y los funcionarios del proyecto. Después, estudio percepciones a respeto a los impactos sociales que pueden ocurrir si no hay suficientes medidas de mitigación, y finalmente examino varias propuestas para evitar o mitigar los impactos negativos propuestos por moradores, lideres locales, oficiales de ANAM, y otros.

 

Participación en el Proyecto

 

Un proyecto hidroeléctrico y sus implicaciones es producto de mucha preparación y planificación. Durante la primera etapa, las comunidades afectadas están informadas sobre el proyecto, y están involucrados en maneras como encuestas y entrevistas sobre su modo de vida y actividades familiares, y reuniones para presentar la información sobre el proyecto y recoger el sentimiento de la comunidad sobre el proyecto. Hay que incluir este tipo de información personal en el EIA que es entregado a ANAM, para que sirva como herramienta en el proceso de desarrollar el resto del proyecto. Las dinámicas al principio entre las comunidades y la empresa promotora pueden revelar mucho sobre las etapas futuras de un proyecto, y que tipo de efectos sociales pueden anticipar las comunidades. Aunque el plan para este proyecto hidroeléctrico ha existido desde los años setenta, este informe solo investiga las ocurrencias durante los últimos años, durante el último intento de construirlo.

 

Presentación del Proyecto

 

Cuando empezó el proyecto la empresa promotora organizaba reuniones para informar a la gente de las características del proyecto y las intenciones de la empresa promotora. Un traductor asistió a sus reuniones para traducir la información a dialecto. Muchos moradores explicaban que el proyecto no fue presentado como una propuesta u opción, sino que era un hecho que se tenia que aceptar (Habitante 5). Casi todos los entrevistados confirmaron que nunca habían sido consultados «¿Está de acuerdo con el proyecto?» (Habitante 6) Para recoger datos socioeconómicos sobre las comunidades afectadas el Promotor hizo una encuesta verbal. Casi todos los moradores confirmaron que nunca tuvieron la oportunidad de ver o leer la encuesta personalmente, y que se les aseguró que la encuesta no serviría como documento publico ni oficial. «Trajeron la encuesta, y nos empezaron a decir que esta era una simple encuesta, que no era una negociación, que nadie los va a sacar ustedes del área. Pero cuando nos fuimos dando cuenta poco a poco que la encuesta era…el mismo estudio del proyecto» (Habitante 1). Según los entrevistados, los funcionarios del Promotor hablaban sobre todos los beneficios del proyecto, y prometieron que el proyecto iba a mejorar el modo de vidas. Una mujer de Valle Riscó recontó «Nos dijeron que íbamos a vivir mucho mejor» (Habitante 2). Algunos moradores no querían participar en ni apoyar al estudio, pero ellos dijeron que la encuestadora usaba amenazas. Un varón de Charco la Pava explicó, «Ellos vinieron aquí, y dijeron «si tu no vas a dar paso para medir la casa y la finca, entonces vas a perder la finca» (Habitante 20).

 

La sección del EIA sobre aspectos sociales presenta estadísticas que indican que 70% de los moradores afectados directamente por el proyecto, lo apoyan (Los Santos 236). Casi todo de los moradores entrevistados negaron este porcentaje, y enfatizaron que la gran mayoría de la población afectada no está de acuerdo con el proyecto. Clarificaron que las únicas personas que están de acuerdo con el proyecto son individuales pagados por la empresa promotora. Según un hombre de Charco la Pava, «Voy a desmentir lo que dice el informe de Hidroteribe… Actualmente, 10% de todo la población afectada está a favor» (Habitante 8). Además, en contra de la ley que exige que se presenta el EIA dentro del área de influencia a la gente afectada por el proyecto, se lo presentó en Almirante, un pueblo afuera del área afectada. Por esto, la mayoría de la asistencia era gente no afectada por el proyecto, y pareció que mucha gente estaba de acuerdo con el proyecto (la Habitante 8).

 

Un morador de Valle del Rey sugirió que la falta de interés del Promotor en la actitud de la gente no ha cambiado con tiempo. La idea persiste «…que tenemos aceptar. No le importa [al Promotor] la opinión en contra, a favor. Si escuche, pero no le hace caso» (Habitante 5). Un varón de Valle Riscó mencionó que era inconveniente asistir a algunas reuniones, porque ocurrieron fuera del área de comunidades afectadas en lugares como Ojo de Agua y Changuinola. «Cuando nosotros no estábamos de acuerdo, ellos usaron otros métodos para llevar las reuniones afuera» (Habitante 3). Él continuó diciendo que aunque la empresa promotora pagara por transportación, viajar exige tiempo, y por eso no hubo muchas personas que fueron (Habitante 3). Un varón de Charco la Pava expresó descontento por la falta de transparencia de las operaciones del proyecto, y que aunque él solicitó los resultados del EIA todavía no lo ha recibido. «ellos lo prometieron [mandar el EIA] y nunca he visto este documento del estudio, y ya quiere empezar la construcción.»

 

Reubicación Dentro de BPPS

 

ANAM Res. IA- 086-2005; articulo 5, cláusula 38: El Promotor no está autorizado para realizar reubicación de población o conformación de asentamientos humanos dentro del área protegida Bosque Protector de Palo Seco ni en ninguna otra área protegida bajo la jurisdicción de la ANAM.

 

Un componente clave de la promoción de este proyecto ha sido la promesa de reubicación en la misma área; dentro del BPPS. Desde el principio, la empresa promotora ha prometido a la gente afectada que puedan reubicar arriba del embalse en la misma región, aunque sea área protegida (Habitante 20). Porque el área es un protector y no una reserva, las restricciones son más relajadas y se permite actividades de sustancia (Pinedas). Una trabajadora social en el area identificó este factor como lo que distingue este proyecto de otros proyectos en el pasado cuales han dañado a las comunidades reubicadas. Ella elaboró, «Este proyecto es diferente de todos los otros proyectos que han construido al nivel nacional, porque las familias van a seguir viviendo en el área. Se van a quedar las familias viviendo arriba de la cota» (Trabajadora social). Pero, esta seguridad todavía no está confirmada por ANAM, la institución responsable del uso de áreas protegidas (Pinedas). Según un funcionario de la oficina regional de ANAM en Bocas del Toro, encargado de la protección de la calidad ambiental del área, «Hay una posibilidad, pero hay la misma posibilidad que no se puedan reubicar adentro del área protegido» (Rodríguez). Actualmente, la oficina de ANAM está esperando la entrega del plan de reubicación, hecho por AES Changuinola, para revisar lo que propone la empresa promotora. «Esto está ahora mismo en proceso de entendimiento. Se va a hacer una consulta respectivo al estamento reglamentario para ver si se puede modificar este articulo de la resolución, pero no hay nada seguro» (Pinedas). Al tiempo de este estudio, todavía falta el plan de reubicación, y por esto cualquier garantía sobre reubicación dentro del BPPS hasta ahora «no es valido. La resolución se mantiene en todas sus partes,» explicó un técnico quien participó en la evaluación del proyecto Chan-75 (Camaño).

 

 

Autoridades Locales

 

Para entender como las comunidades han sido involucradas en el proyecto, es útil examinar como las autoridades que representan esas comunidades participaron. En el corregimiento Valle del Riscó hay dos figuras relevantes: el Representante del corregimiento, Rubén Vegas; y la Alcaldesa de Changuinola, Virginia Abrego. El Representante indicó que después del principio, él sentía como si la empresa promotora no tuviera interés en cooperar con él «Yo, como autoridad más alta del corregimiento, puedo decir que la empresa no está trabajando conmigo» (Vegas). Él afirmó que la empresa promotora no contesta a sus llamadas, y no participa con él en reuniones. También, a él le concierne que si no obtienen ahora documentos firmados por la empresa promotora sobre los beneficios del proyecto, cuando se complete el proyecto la gente no van a recibir más (Vegas). La Alcaldesa describía tratamiento similar. Según ella, después del principio, AES no le invitaba a reuniones, y que aunque ella haya solicitado copias de los estudios que hizo el Promotor, no hayan llegado. Según ella, «No quieren respetar al gobierno local» (V Abrego).

 

Impactos Sociales

 

Según la gente entrevistada, los impactos sociales que trae Chan-75 afectará a comunidades en corto y largo plazo, y proviene de origines como la preparación y construcción del embalse, la existencia de una represa, la reubicación de los moradores del área de la represa, y las acciones incluidas en el plan de reubicación y inversión social que lleva a cabo el Promotor y el gobierno. En esta sección, solo investigo percepciones de los impactos que vienen como resultado del proyecto, sin considerar ideas o promesas de mitigación, los cuales indago en la próxima parte.

 

EL RESTO DE LA INFORMACIÓN SOBRE HALLAZGOS Y DISCUSIÓN, MÁS REFERENCIAS ESTÁ EN EL DOCUMENTO WORD COLOCADO AL INICIO DE ESTA ENTRADA

 

Conclusión

 

Este informe tiene la intención de servir como un estudio para elucidar percepciones sobre cuales impactos sociales pueden afectar a las comunidades en el área influida directamente por el proyecto hidroeléctrico, Chan-75. No intentaba juzgar el valor absoluto de la hidroeléctrica, y es importante reconocer que el proyecto ocurre en un contexto nacional e internacional, y que hay varias fuerzas y necesidades las cuales influyen en su dirección. El propósito de este informe fue el de investigar percepciones con respeto a los impactos sociales en un lugar específico, para entender el papel de la gente en el proyecto y como va a ser afectada, y como ellos pueden evitar y mitigar los impactos negativos.

 

Los testimonios de los moradores revelan que la mayoría de la gente afectada por el proyecto no estaba tan involucrada en el proceso del proyecto como ellos quisieran. Al principio, el proyecto fue presentado como un hecho fijo en vez de una posibilidad, y hasta ahora los moradores creen que la empresa promotora les ha tratado como si no tuvieran la opción de rechazarlo. También el proyecto fue presentado como un paquete de beneficios para todos los afectados, pero todavía faltan documentos firmados por el AES que asegurarían lo que ellos recibirán. Cuando las personas no cooperaban con las acciones diagnósticas hechas por la empresa promotora, ellos fueron amenazados con la perdida de sus propiedades sin compensación. Finalmente, las autoridades locales expresaban su descontento con el nivel de participación, y sugerían que al Promotor no le interesa involucrarles. Por esto, los entrevistados indicaron que la gran mayoría de la población afectada no está de acuerdo con la manera en que el proyecto ha avanzado.

 

Según mis entrevistas, los impactos sociales del proyecto pueden ser diversos y profundos, especialmente si no se implementan maneras efectivas de mitigar los mismos. Los impactos se puede incluir: empleo a corto plazo; desempleo a largo plazo; migración acelerada debido a las carreteras; disminución de productividad agrícola; aislamiento de familias; pobreza; conflictos de tierra; problemas de salud; disminución de confianza en el gobierno nacional; reforzando las estructuras tradicionales de políticas; inversiones sociales; y la aparición de un sector de turismo que puede crear empleo y un mercado para productos locales.

 

Finalmente, hay algunas medidas de mitigación las cuales ya ha tomado el Promotor, y hay muchas más las cuales han sugerido los moradores afectados. La falta de documentos firmados sobre los compromisos de la empresa promotora ha contribuido a una falta de confianza en AES entre los moradores, y existe mucha duda sobre los beneficios que van a recibir en el futuro.

 

Este informe funciona como una investigación preliminar de los impactos sociales que las comunidades afectadas pueden prever. Faltan datos cuantitativos sobre los cambios socio-económicos, los cuales pueden ofrecer un resultado más tangible. También, después de que AES entregue el plan de reubicación, será posible evaluar sus recomendaciones, investigar su verosimilitud, y analizar los impactos específicos del plan en las comunidades. Especialmente porque este proyecto está avanzando tan rápidamente, hay que continuar con estudios futuros para que las consecuencias no ocurran como supresas. Es esencial que las comunidades dentro del área de influencia, la empresa promotora, el gobierno local y nacional, y los ONGs relevantes entiendan y evalúen constantemente las implicaciones sociales de este proyecto, para asegurar que la gente afectada no sea olvidada.


[1] Significa que la mayoría de las acciones fueron comprado por AES Changuinola.[2] Traducido de ingles.Fotos: Cortesía de ACD.

Isla Barro Colorado, Monumento Natural de Panamá

Barro Colorado, santuario panameño protegido por el Instituto Smithsonian

     
 
Esta es una de las variadas especies que se encuentra en Barro Colorado. Nombre común: Lily; nombre científico: Hymenocallis pedalis. Foto/Christian Ziegler

Por James Aparicio

(AFP) – Miles de especies de insectos, plantas exóticas, 120 especies de mamíferos, monos y bosques en peligro de extinción sobreviven en Barro Colorado, un santuario de vida silvestre tropical en Panamá, bajo la protección del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (ISTRI).

Situado a unos 38 km al sureste de la capital, Barro Colorado es la cima de una colina que se convirtió en isla en 1914, cuando Estados Unidos creó artificialmente el lago Gatún para abastecer de agua dulce el lado atlántico del Canal.

Canopy Barro Colorado Island, Panama

Desde 1923 es reserva biológica, después de que el entomólogo norteamericano James Zetek inició las primeras investigaciones científicas.

Todos los años, 400 científicos e investigadores de países como Estados Unidos, Francia, Inglaterra, Canadá, México, Puerto Rico, Alemania, Venezuela, Costa Rica, Colombia o España acuden a la isla para estudiar su hábitat.

Barro Colorado «es la estación científica del trópico más antigua del mundo» lo que ha permitido que se realicen unas 3.000 investigaciones, teorías y estudios pioneros, aseguró a la AFP la coordinadora científica, Oris Acevedo.

Estas investigaciones abarcan la flora, la dinámica de los bosques tropicales, las aves, la forma en que sobreviven las semillas y plántulas de los depredadores, el comportamiento de los animales y la regeneración de la floresta, explicó Acevedo.

Cinco mil visitantes, en su mayoría turistas, visitan Barro Colorado tras una travesía en taxi acuático, manejado por el STRI o empresas turísticas locales que cobran entre 12 a 70 dólares por persona, que sirven para mantener la estación científica.

El mono aullador, el mono araña, el capuchino cariblanco, el tamarín de Geoffrey y el mono nocturno compiten en la protegida reserva con millones de hormigas arrieras que todos los años cortan el 15% de las hojas del bosque, y que sirven para fertilizar los hongos que cultivan como alimento en sus nidos subterráneos.

Las 1.200 especies de plantas; junto a los saínos, perezosos, coatíes y pájaros de las más diversas especies pueden apreciarse en un recorrido guiado por biólogos del STRI a través de un sendero boscoso encarpado de 2 kilómetros. En la isla caen 2.600 milímetros de lluvia al año y las avispas de higueras viajan hasta 14 kilómetros para polinizar las frutas de higo.
Según Acevedo, la existencia de Barro Colorado permitió al estadounidense Ray Carpenter realizar entre 1931 y 1934 un estudio sobre la organización social de los monos aulladores, mientras que el ornitólogo panameño Eugene Eisenmann descubrió que la fragmentación de los bosques provocó la desaparición de varias especies en la isla.

El STRI, la única estación del Smithsonian fuera de Estados Unidos, no permite la tala de árboles en Barro Colorado ni uso de fertilizantes, insecticidas, introducción de plantas exóticas, ni colecta de flora o fauna, incluidos los vertebrados, que no estén relacionadas con una investigación previamente autorizada.

Gatún Lake, Panama Canal

En este paraíso animal protegido hay 100 especies de cucarachas, 109 especies de mariposas poco conocidas fuera de la comunidad científica, 1.000 especies de chinches, 71 especies de reptiles y 335 especies de aves, entre tucanes, pavadas, loros y pericos.

El autor es corresponsal de la Agencia France Press en Panamá.

Músical ambiental de Obregón fue exitoso

TRANCE SUBMARINO.

Música por el ambiente

Manuel Vega Loo
mvega@prensa.com

Manuel Obregón es un músico costarricense que combina su arte con un mensaje de conservación ambiental.

Obregón llega a Panamá invitado por la Fundación Natura para presentar su espectáculo «Trance Submarino», con el fin de conmemorar el «Mes de los océanos».

El pianista, quien confiesa que se vinculó al tema ambiental desde 1999, actuó el 25 de septiembre en el auditorio de Florida State University.

Presentó su música acompañada de un video realizado por el oceanógrafo español Simón Bolívar. «Diseñamos una filmación para que la gente sepa cómo es estar bajo el agua… queremos que se relajen y entren en una especie de trance», asegura.

El espectáculo estuvo dividido en siete partes. La figura central es una tortuga, que va hilvanando la historia. «La veremos desde que nace y cómo recorre las diferentes zonas de arrecifes». En Panamá, se estrenó la fusión de música e imagen, que será presentada en octubre de 2008 en Barcelona, en el Congreso Mundial por la Naturaleza.

Denuncian a pesqueras europeas

ecología.

Greenpeace denuncia a pesqueras europeas

Las grandes empresas pesqueras roban unas 300 mil toneladas anuales de pescado del Pacífico.

SIDNEY, Australia /EFE

Pesqueras europeas y latinoamericanas, como Albacora, Calvopesca, Nirsa y Conservas Garavilla, faenan ilegalmente en el Pacífico central y occidental, denunció Greenpeace en un nuevo informe.

El activista Jason Collins, de Greenpeace, explicó a Efe que presentarán el documento al Comité de Conformidad Técnica de la Comisión de Pesquerías del Pacífico Central y Occidental, en la reunión que celebrará esta semana en los Estados Federados de Micronesia.

Collins dijo que la organización ecologista participará en las sesiones como observador, y explicó que existen dos problemas básicos en el Pacífico: «Agujeros negros» en las zonas económicas exclusivas y traslados de mercancías de un barco a otro para saltarse las regulaciones.

Greenpeace propone a los gobiernos del Pacífico que cuando negocien sus acuerdos de pesca con la Unión Europea o con otros países lo hagan como bloque multilateral, en una acción unificada y concertada, para que se apliquen las mismas normas en toda la región.

Las grandes empresas pesqueras roban unas 300 mil toneladas anuales de pescado del Pacífico, valoradas en cuantías muy superiores a los ingresos que sus licencias generan para los países de la región, según la organización.

 

Protesta a favor de los delfines

ambientalistaS.

Protesta a favor de los delfines

LA PRENSA/Carlos Lemos

Unas 35 personas protestaron.

José Arcia
jarcia@prensa.com

La sede de la Embajada de Japón en Panamá fue el escenario para que un grupo de ambientalistas protestara ayer en «repudio contra la cruel matanza que realiza ese país» en contra de delfines y ballenas.

La iniciativa es internacional. La misma acción realizaron ambientalistas de por lo menos 40 ciudades del mundo, dijo Celma Moncada, de la Fundación Humánitas, organizadora del evento en Panamá. Desde las 4:00 de la tarde, y por espacio de una hora, los ambientalistas se apostaron en la sede diplomática para gritar: «atención, atención, no más caza en Japón» y «no queremos asesinos de mamíferos marinos».

Japón captura delfines para enviar a parques acuáticos y «asesina» a la mayoría para comercializar su carne, denunciaron.

Para Ariel Rodríguez, esto representa la muerte de 15 mil delfines al año.