Indígenas rechazan proyectos mineros e hidroeléctricos en sus tierras

PROTESTA: INDIGENAS RECHAZAN PROYECTOS MINEROS E HIDROELECTRICOS
Otorgan concesiones sin consultar
Juan Limachi | Crítica en Línea

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Parvularios municipales de la Alcaldía de Panamá celebraron el Día de la Hispanidad.


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Concesiones mineras, centrales eléctricas y petroleras transnacionales amenazan el hábitat de los pueblos indígenas americanos, denunciaron ayer líderes del Congreso Interamericano sobre Pueblos Indígenas, que culminó ayer.

Según Pedro Rodríguez, presidente del Congreso General Ngöbe Buglé, las autoridades otorgan concesiones sin consultar a las comunidades nativas, que por derecho son propietarios de estas tierras.

«A más de 500 años de invasión de nuestras tierras, enfrentamos una realidad apocalíptica: ríos contaminados, deforestación de nuestras tierras, especies animales desaparecidas y amenazas de epidemias», sostuvo.

Rodríguez precisó que cerca de 150,000 habitantes de la comarca se encuentran también expuestos a enfermedades, desnutrición y al despojo sistemático de sus tierras.

Berbenisio Pepaquito, presidente del Congreso General Emberá, señaló que el 12 de octubre representó el despojo y la marginación de sus culturas originarias.

«Actualmente, en esta zona viven cerca de 12.500 personas que se encuentra aislados debido a que no cuentan con vías de comunicación entre sus comunidades, sólo se comunican por trochas y por los ríos».

NIÑOS Y NIÑAS CELEBRAN

Con actividades culturales, bailes típicos y representaciones artísticas de Centroamérica Sudamérica y Europa, los trece parvularios municipales de la Alcaldía de Panamá celebraron este viernes, el Día de la Hispanidad.

Desde tempranas horas de la mañana, niños y niñas ataviados con ropa propia de las regiones que representaban, participaron del acto en el centro Juan Ramón Poll, ubicado en Calidonia.

Al Gore y la ONU ganan el Premio Nobel de la Paz

  GALARDÓN POR EL ESFUERZO AMBIENTAL CONTRA EL CAMBIO CLIMATICO

Al Gore y la ONU ganan el Premio Nobel de la Paz

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Al Gore fue el vicepresidente de Estados Unidos en la administración de Bill Clinton (1993-2001).

Redacción

BBC, PANAMA AMERICA

EL EX vicepresidente de Estados Unidos, Al Gore y el Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) de la Organización de Naciones Unidas fueron galardonados con el Premio Nobel de la Paz 2007.

Gore y el IPCC presidido por el indio Rajendra Pachauri e integrado por cerca de 3, 000 científicos compartirán el premio de 1.5 millones de dólares, que será entregado en el aniversario de la muerte de su fundador, Alfred Nobel, el 10 de diciembre.

El Comité Nobel anunció en Oslo, Noruega, que fueron merecedores del galardón «por sus esfuerzos por acrecentar y diseminar el conocimiento sobre el cambio climático provocado por los seres humanos, así como por establecer las bases para que se tomen las medidas necesarias para revertirlo».

El comité especificó que «a través de los informes científicos que ha presentado en las últimas dos décadas, el IPCC ha creado un consenso cada vez mayor sobre el vínculo entre las actividades humanas y el calentamiento global».

Al Gore, por su parte, «ha sido durante largo tiempo uno de los principales políticos ambientalistas del mundo».

IPCC
El IPCC se estableció en 1988 por iniciativa de la Organización Meteorológica Mundial y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).

En su primer informe, presentado en 1991, concluyó que el calentamiento de la atmósfera era real e instó a la comunidad internacional a tomar medidas.

Esas conclusiones impulsaron la aprobación, en 1992, de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y, más tarde, las negociaciones del Protocolo de Kioto.

«Miles de científicos y funcionarios de más de cien países han colaborado para conocer con mayor certeza la escala del calentamiento», dijo el Comité Nobel.

«En los últimos años los vínculos se han hecho más claros y las consecuencias más evidentes», añadió.

AL GORE
Al Gore, de 59 años, fue vicepresidente de Estados Unidos de 1993 a 2001, en el gobierno de Bill Clinton.

Además, fue el candidato demócrata a la presidencia en las controvertidas elecciones de 2000, que perdió ante George W. Bush.

Según el anuncio del premio, Gore «se dio cuenta en una etapa temprana de los desafíos climáticos que enfrenta el mundo».

«Su fuerte compromiso, reflejado en su actividad política, conferencias, filmes y libros, ha fortalecido la lucha contra el cambio climático».

El Comité Nobel opina que «él es probablemente el individuo que más ha hecho por fomentar una mayor comprensión a nivel mundial de las medidas que se deben adoptar».

El anuncio concluye con la advertencia de que «es necesario tomar medidas ahora, antes de que el cambio climático quede totalmente fuera del control de los seres humanos».

Al Gore ganó Premio Nóbel de la Paz

CAMBIO CLIMÁTICO.

Al Gore gana Nobel de la Paz

OSLO, Noruega/ EFE

El ex vicepresidente de Estados Unidos Al Gore ganó el premio Nobel de la Paz por su participación en el impulso de la acción internacional contra el calentamiento global, antes de que el fenómeno «sobrepase el control del hombre».

El premio parece ser un desaire para el presidente George W. Bush, quien ha desconfiado de la ciencia sobre el calentamiento global; y ha reavivado las peticiones de seguidores de Gore para que intente, otra vez, llegar a la Casa Blanca.

reconocimiento. PANEL DE CAMBIO CLIMÁTICO COMPARTE PREMIO.

El Nobel de la Paz, para Al Gore

Algunos han interpretado el premio como un desaire para el presidente estadounidense George W. Bush.

El premio compartido de un millón y medio de dólares fue concedido entre más de 180 candidatos.

EFE/John G.Mabanglo

AGRADECIDO. El ex vicepresidente estadounidense ha visto reconocidos sus esfuerzos en su lucha por frenar el calentamiento global.

OSLO, Noruega /REUTERS

El ex vicepresidente Al Gore y el panel climático de Naciones Unidas ganaron el viernes el Premio Nobel de la Paz por su participación en el impulso de la acción internacional contra el calentamiento global, antes de que el fenómeno «sobrepase el control del hombre».

El premio parece ser un desaire para el presidente George W. Bush, quien ha desconfiado de la ciencia sobre el calentamiento global y rechazado que la causa de este sea la emisión de gases. Pese a ello, la Casa Blanca dijo que estaba feliz por los ganadores y alabó su trabajo.

Gore, quien perdió por una pequeña diferencia con Bush en las elecciones presidenciales de 2000, y el Panel Internacional sobre el Cambio Climático (IPCC, por su sigla original) fueron elegidos para compartir un premio de un millón y medio de dólares entre cerca de 181 candidatos. El ex senador demócrata, en declaraciones desde California, dijo que el calentamiento global «es el desafío más peligroso que hemos enfrentado jamás», pero se negó a abordar el tema de si podría ingresar a la contienda presidencial de Estados Unidos. Gore ha señalado que no tiene planes de hacerlo.

El Comité del Nobel dijo que el premio fue otorgado por sus esfuerzos para captar la atención sobre el impacto de la humanidad en el clima, y las medidas necesarias para dirigirlos antes de que las altas temperaturas provoquen sequías, inundaciones y aumenten el nivel de las aguas.

«La acción se necesita hoy, antes de que el cambio climático sobrepase el control del hombre», dijo el comité. Gore advirtió que el cambio climático, vinculado a sequías e inundaciones, podría amenazar las condiciones de vida en todo el mundo y provocar migraciones masivas. «Queremos poner el cambio climático en la agenda (de prioridades), en conexión con el tema de la paz», sostuvo el presidente del comité, Ole Danbolt Mjoes.

ADVERTENCIA

Gore ha enseñado extensamente sobre la amenaza del calentamiento global, y el año pasado protagonizó su propio documental, ganador de un Oscar, An Inconvenient Truth (Una verdad incómoda) para advertir sobre los peligros e instar a la acción contra ello.

«Es probablemente el único individuo que más ha hecho para crear una mayor comprensión mundial de las medidas que debemos adoptar», dijo el Comité del Nobel.

El comité indicó que la búsqueda de acciones para detener el calentamiento global, se ha llevado a cabo de manera convincente por la ciencia.

«Mientras que en la década de 1980 el calentamiento global parecía ser apenas una hipótesis interesante, la década de 1990 produjo evidencia para su respaldo».

«En los últimos años, las conexiones han sido mucho más claras, y las consecuencias aún más evidentes», agregó. El debate sobre el calentamiento global se ha centrado en parte en cálculos científicos, y varios escépticos señalan que se ha observado que algunos cambios en el clima se han producido dentro de los patrones de los ciclos naturales.

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Una Verdad Inconveniente

 

Se requiere un plan de ordenamiento territorial para evitar tanto abuso ambiental

PINTADA DE VERDE

NECESIDAD. No hay duda, los grandes jugadores del mercado en este mundo globalizado nos han descubierto. Todo el mundo quiere venir a Panamá, comprar tierras, construir, construir, construir y hacer grandes negocios. De paso, dicen, «el país se beneficiará, habrá empleo para todos y seremos felices por siempre». No estoy segura. La historia de este país y sus cíclicos períodos de auges económicos –desde los tiempos del Camino de Cruces, el ferrocarril e incluso la construcción del Canal– son prueba de lo contrario.

La riqueza generada en esos momentos estelares se quedó entre los vivos de siempre, mientras el país continúo por la senda que hoy nos distingue: una gran desigualdad. Ahora, en este pequeño territorio de solo 77 mil kilómetros cuadrados se quiere hacer de todo: turismo masivo y megaproyectos inmobiliarios en áreas de gran fragilidad ambiental, como costas e islas; minería a cielo abierto junto a maravillosos bosques; grandes proyectos petroleros y varias refinerías; cementeras junto al Canal; ampliación de instalaciones portuarias o nuevos barrios amurallados y con cancha de golf, por supuesto, a costa de los manglares; una larga lista de hidroeléctricas –para satisfacer el inagotable apetito de nuestros tiempos–, rellenos… en fin, todo es posible en Macondo.

Y uno se pregunta, ¿habrá alguien pensando en las consecuencias de tanto abuso? No es cuestión de cerrarnos a la inversión y el desarrollo, sino de hacerlo bien. Necesitamos con urgencia un gobernante que se preocupe más por el futuro del país y sus riquezas naturales que por las próximas elecciones. Necesitamos un plan de ordenamiento territorial, que determine con rigor los usos permitidos para cada zona del país. Un plan de ordenamiento territorial que se cumpla (a diferencia de lo ocurrido en las áreas revertidas) y unos funcionarios dispuestos a enfrentar las presiones y hacerlo cumplir. Hombres y mujeres que, como el hoy Nobel de la Paz, Al Gore –y los científicos del Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU– hagan la diferencia. Eso necesitamos.

Lina Vega Abad
lina@prensa.com