Tres indígenas más fueron aprehendidos en Changuinola

Tres indígenas más fueron aprehendidos en Changuinola

Burica Press. Panamá. 15 de enero de 2008.

La represión policial y el robo de las tierras en el río Changuinola continúan. Tres ciudadanos de la etnia Ngobe de Charco La Pava han sido detenidos por la policía que custodia a los trabajadores que están ingresando a las fincas de los indigenas. Hasta el momento desde medio día que se dio el incidente no se sabe a que estación policial fueron remitidos, ya que ha sido infructuoso recibir información por parte de la Alcaldía de Changuinola y la corregiduría de Valle Riscó. Ambas autoridades niegan saber la suerte de los detenidos.

Los ciudadanos aprehendidos responden a los nombres Venero Santos, Abel Santos y Francisco Castillo, todos mayores de edad. Con estas tres nuevas aprehensiones suman un total de 57 indígenas detenidos en menos de dos semanas por la lucha que mantienen por la defensa de su tierra, donde la empresa AES Changuinola, literalmente está asaltando las propiedades indígenas de la cuenca media del Río Changuinola con la ayuda de la Policía Nacional, quien custodia a los trabajadores que realizan dicho asalto in situ.

Los indígenas y ambientalistas han denunciado que AES Changuinola está actualmente totalmente fuera de la ley y la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM) no los detiene, a pesar de tener la potestad legal para hacerlo de inmediato, ante el incumplimiento flagrante del Estudio de Impacto Ambiental condicionado que le fue aprobado en el año 2005.

«Cabe una denuncia penal por corrupción ante estos abusos ambientales en áreas protegidas y la violación de los derechos humanos de los indígenas», afirmó el ambientalista, Ariel Rodríguez Vargas, Presidente de la Alianza para la Conservación y el Desarrollo, una pequeña ONG que lidera un esfuerzo de proteger la Reserva de la Biosfera y las áreas indígenas presentes en ella y que están siendo acosadas para abandonar a la fuerza sus tierras por las concesiones que ha dado el gobierno panameño en el área protegida del Bosque Protector de Palo Seco.

Migración masiva de camarón Atya crassa por efecto de represa de Bayano

MIGRACIÓN MASIVA DE UN CAMARÓN DE RIO

ATYIDAE, (Atya crassa) COMO CONSECUENCIA DEL

CIERRE DEL RÍO BAYANO, REPÚBLICA DE PANAMÁ

 

Richard H. Goodyear

Víctor Martínez Vega

Juan B. Del Rosario

Centro de Ciencias del Mar y Limnología Universidad de Panamá

 

RESUMEN

El cierre de las compuertas de la Represa Bayano el 16 de marzo de 1976, y el descenso marcado y brusco del flujo de agua río abajo de la represa, inició una migración masiva río arriba del camarón de río, Atya crassa. Se recolectaron un total de 16 especies de animales acuáticos en el área de la recolección.

INTRODUCCIÓN

El cierre de las compuertas de la represa hidroeléctrica del Río Bayano presentó una oportunidad única para hacer observaciones y recolectar muestras de la fauna en la parte del río abajo de la represa que se secó como resultado del cierre.

Una observación inesperada fue la migración masiva del camarón de río, Atya crassa, que comenzó por la noche del 16 de marzo de 1976, día del cierre de las compuertas.

LUGAR DE RECOLECCIÓN, MATERIALES Y MÉTODOS

El lugar de recolección escogido queda aproximadamen­te a 1 km río abajo de la represa. El río en este punto tenía unos 50 m de ancho. En el centro del lugar había un área de corriente fuerte; río arriba de la corriente, un charco largo con una profundidad máxima de 3 m y río abajo de la corriente, un sector con profundidad máxima de 1 m y con corriente rápida.

Se efectuaron dos períodos de recolección el 16 de marzo de 1976. El primero, entre las 13:30 y las 15:30 horas, comenzó tan pronto como el nivel de agua en el área de corriente había bajado lo suficiente para permitir recolectar (el río comenzó a bajar alrededor de las 11:30 horas). El segundo, entre las 19:00 y las 21:30 horas, tenía el propósito de recolectar muestras y hacer obser­vaciones pertinentes durante la noche.

La gran mayoría de los ejemplares se capturaron con las manos, en el área de la corriente, volteando las piedras y recogiendo los animales que se encontraran. Unoschupa-piedras (Loricariidae) fueron capturados con arpón.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

El cuadro 1 presenta una lista de las especies recolecta­das y el número de individuos capturados. A continuación, se presentan algunas observaciones.

Moluscos: Se recolectaron gasterópodos del género Neritina (muy abundantes) y pelecípodos que no pudieron ser identificados. Todos los moluscos tenían las conchas dañadas. Esto tal vez se debe a abrasión o a una falta de carbonato de calcio en su dieta.

Crustáceos Decápodos: En este grupo, el camarón de río Atya crassa (Fig. 1) era la especie más común que encontramos entre las piedras en el área que tenía la corriente fuerte. Este camarón se capturó con redes durante los estudios de los peces y crustáceos decápodos del Río Ba­yano en 1974 (Asesores Ecológicos, 1975), pero en poca cantidad. En esta ocasión, con la disminución del volumen de agua, se pudo apreciar la abundancia de esta especie en su habitat preferido (corrientes fuertes donde no se les puede capturar eficientemente con redes). Se podían apreciar por miles y en poco tiempo se recolectaron alre­dedor de 1500 ejemplares.

 CUADRO 1

Lista de los moluscos, crustáceos decápodos y peces
recolectados en el Río Bayano, 16 de marzo de 1976, con
los números de ejemplares capturados.

MOLUSCOS

Gasteropoda

Neritidae: Neritina latissima Sowerby

Pelecipoda

Sin identificación

CRUSTÁCEOS DECÁPODOS

Atyidae: Atya crassa Smith

Palaemonidae: Macrobrachium americanum Bates         29

PECES

Characidae: Gephyrocharax atricaudatus Meek y Hildebrand    1

Gymnotidae: Sternopygus dariensis Meek y Hildebrand             1

Apteronotus rostratas (Meek y Hildebrand)                                 1

Pimelodidae: Rhamdia wagneri (Günther)                                    1

Pimelodella chagresi (Steindachner)                                              1

Trichomycteridae: Pygidium sp.                                                     3

Loricariidae: Hypostomusplecostomus (Linnaeus)                     1

Chaetostoma fischeri Steindachner                                               17

Loricaria uracantha Kner y Steindachner                                   1

Sturisoma ctturense (Meek y Hildebrand)                                  6

Synbranchidae: Synbranchus marmoratus Bloch                      1

Gobiidae: Eleotríspicta Kner y Steindachner                              1

Se capturó otra especie de crustáceo decápodo, el camarón Macrobrachium americanum, cuyos ejemplares variaban en edad desde juveniles hasta adultos; entre ellos, varios especímenes alcanzaron aproximadamente 0.4 kg de peso total

Peces: Aparentemente, el hábitat preferido del barbudo Pygidium también se ubica en las áreas de corrientes fuer­tes. Se recolectaron 3 ejemplares de alrededor de 10 cm de largo cada uno. Durante los estudios de 1974 (Asesores Ecológicos, 1975), solamente se obtuvo un ejemplar de ese tamaño.

Los ejemplares de chupa-piedras (Loricariidae) fueron capturados por la noche en una pequeña corriente que quedó en el área donde estaba la corriente fuerte. La ma­yoría se recogieron a mano, pero algunos fueron captu­rados con arpón.

Migración del camarón de Río, Atya crassa: La migra­ción comenzó entre las 16:00 horas (hora en que partimos del sitio de recolección) y las 19:00 horas (hora en que regresamos al sitio). A lo largo de cada ribera del río había una banda de miles de Atya crassa migrando río arriba; esto, a pesar de que casi no se notaba una corriente que le pudiera servir como guía de dirección que era río arriba. Los participantes en la migración tenían longitudes totales entre 2 y 4 cm. Formaron bandas compactas de individuos, todas en movimiento constante. Cada banda tenía un ancho de aproximadamente 8 a 10 cm. Una migración de esta índole en Atyidae nunca ha sido reportada anterior­mente (Comunicación Personal del Dr. Manning del Institu­to Smithsoniano a J.B. Del R.).

Este comportamiento sé puede explicar como una posi­bilidad de migración para repoblar las partes altas del río. En invierno, las corrientes fuertes probablemente llevan muchos individuos de Atya río abajo. Cuando viene el verano, ellos aprovechan las corrientes más débiles para migrar río arriba. Como las aguas bajaron rápidamente al cierre de la represa, los Atya, por sus instintos, inter­pretaron esto como una señal de haber llegado el verano y que era momento de migrar a las partes altas del río.

AGRADECIMIENTO

Deseamos manifestar nuestro agradecimiento al Dr. Alberto Perdomo del Proyecto para el Desarrollo Integral del Bayano por haber facilitado transporte, materiales, alimento y personal, asegurando el éxito de éste trabajo. También agradecemos la participación en el trabajo de campo al Dr. Alberto Perdomo, al Lie. Elpidio Pineda y a la Sra. Sonia Gutiérrez de Ceballos. El trabajo foto­gráfico fue realizado por el Profesor Ríos del Centro Audio-Visual de la Universidad de Panamá y montado por el Sr. Rafael Rivera (CCML) a quienes damos nuestras gracias.

Atya crassa

Fig. 1

Vistas lateral (A), dorsal (B) y ventral (C) de Atya crassa colectado en el Río Bayano.

LITERATURA CITADA

Asesores Ecológicos. 1975. Proyecto de investigación de la fauna y fitoplancton relacionados con la construcción de la represa del Bayano. Informe Final. Asesores Ecológicos, S. A.

REFERENCIA FUENTE:

Goodyear, R. H., V. Martínez-Vega, J. B. Del Rosario. 1982. Migración masiva de un camarón (Atya crassa) como consecuencia del cierre del Río Bayano, República de Panamá. ConCiencia 9 (2): 8-9.

Edición digital para dominio público: Centro de Estudios de Recursos Bióticos, Universidad de Panamá.

Plantas medicinales contra el Alzheimer

ALZHEIMER. PANAMÁ, CENTRO DE INVESTIGACIÓN.

Una flora medicinal

En el país se han hallado plantas, nunca antes descubiertas, que pueden ayudar a crear drogas contra el Alzheimer. Hoy día se hace en Panamá una de las investigaciones más importantes sobre la patogénesis y cura de esta enfermedad.

MCT Direct

Shelmar Vásquez Sween
svasquez@prensa.com

La mirada de científicos europeos y norteamericanos está sobre Panamá. ¿La razón? Se ha encontrado dentro de la biodiversidad vegetal panameña que existen plantas 100% nativas que guardan dentro de su composición el secreto para retardar el proceso degenerativo que sufren los 8 millones de pacientes en el mundo que padecen la enfermedad de Alzheimer.

Los autores del hallazgo son un grupo de investigadores del Centro de Investigaciones Farmacognósticas de la Flora Panameña de la Facultad de Farmacia, de la Universidad de Panamá, que lidera la especialista en farmacognosia, Ángela I. Calderón.

La doctora informa que el proyecto de investigación que se inició en 2005 y ha contado con el apoyo económico de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, ha arrojado resultados que prometen tener un impacto en el ámbito socioeconómico nacional e internacional, debido a la necesidad que hay de crear nuevas drogas para tratar esta enfermedad.

Explica que el estudio está dividido en dos líneas de investigación, basado en la detección de compuestos que tengan una clara actividad inhibitoria sobre las enzimas de acetilcolinesterasa y debeta-secretasa, que influyen drásticamente sobre el paciente con Alzheimer.

Calderón argumenta que en el primer caso (acetilcolinesterasa) se estudiaron 58 plantas nacionales pertenecientes a las familias de las Amaryllidaceaee, jamás investigadas.

Ocho de ellas demostraron tener en su estructura sustancias que ayudan a bloquear la acetilcolinesterasa, que es la encargada de estimular en el paciente los síntomas característicos de la patología.

«En el mercado, hoy día, hay drogas inhibitorias de la acetilcolinesterasa. Pero lo importante es que en Panamá se encuentra este tipo de compuesto que antes era exclusivo de algunos países (lo que hace el fármaco más costoso) y que además promete contener otros compuestos más activos que ofrecen a la medicina una mayor efectividad sobre la enfermedad y menos efectos adversos sobre el paciente».

Por otro lado, se estudia también en esta gama de plantas, compuestos que tengan una influencia inhibitoria sobre el otro punto de investigación: la beta-secretasa. Enzima que interviene en la formación de la placa amiloide, que es uno de los agentes que inciden en el proceso neurodegenerativo que se presenta en la enfermedad de Alzheimer.

«De tener lista una droga que actúe en este campo, se evitaría la formación de estas placas sobre las neuronas, que terminan por llevar al paciente a experimentar una muerte neuronal. Y, lo más importante, es que en el mercado no existe este medicamento aún».

Adelanta la investigadora, que en esta última etapa de estudio, su equipo de trabajo —en colaboración con científicos extranjeros— está estableciendo en un ensayo cuáles extractos de plantas tienen compuestos sumamente potentes para bloquear la beta-secretasa.

COMPUESTOS POTENTES CONTRA LA ENFERMEDAD DE ALZHEIMER.

Plantas nativas, en la lupa

Panamá podría entrar a competir en el mercado de la fabricación de drogas para el tratamiento de esta patología.

LA PRENSA / Eric Batista
PRUEBAS. Centro de Investigaciones Farmacognósticas de la Flora de la Universidad de Panamá.

Shelmar Vásquez
svasquez@prensa.com

La misión del Centro de Investigaciones Farmacognósticas de la Flora de la Universidad de Panamá (UP), de estudiar plantas nativas que pueden ayudar a crear medicamentos que ataquen dos enzimas que influyen drásticamente en el proceso degenerativo del paciente con Alzheimer, dio origen a otra investigación que arrojó resultados alentadores.

Explica Ángela I. Calderón, investigadora principal de los estudios mencionados, que este trabajo guarda relación «específica» con la planta producida en China, Huperzia serrata, de la familia Lycopodiaceae, que hoy día sirve para elaborar fármacos inhibidores de la enzima acetilcolinesterasa, que estimula los síntomas de la enfermedad de Alzheimer en los pacientes.

«Esta planta, que es objeto de estudios en Asia y Estados Unidos, se vende como un suplemento que mejora la memoria del paciente. Su elevado costo se debe a que el compuesto necesario —dentro la planta— que se utiliza para hacer la píldora, se encuentra en pequeñas cantidades, es decir, se necesitan muchos prospectos para obtener la sustancia necesaria para fabricar cada cápsula».

En este sentido, Calderón informa que han logrado encontrar 11 especies panameñas, parecidas a las de la familia Lycopodiaceae. Dos de estas han demostrado tener dentro de su composición sustancias potentes que sirven para inhibir la enzima de acetilcolinesterasa, anteriormente explicada.

Otro aporte importante de este estudio en particular, según Calderón, es que las plantas encontradas no habían sido recolectadas ni identificadas anteriormente; por eso, muestras de cada una de ellas han sido guardadas para su conservación en el herbario de la Escuela de Biología de la UP.

CAMINO POR RECORRER

Calderón argumenta que su equipo de investigadores está conformado por tres estudiantes de farmacia (Milagros Cubilla, Johayra Simith y Rocío Sánchez); el coinvestigador Mahabir P. Gupta y el botánico Alex Espinosa. También reciben apoyo de reconocidos investigadores europeos y norteamericanos, que han ayuda- do a identificar las plantas.

Una vez se culmine el estudio, que aún no tiene fecha específica, el próximo paso será utilizar los resultados para que Panamá entre a competir en el mercado de medicamentos que sirven para tratar el Alzheimer.

OPINIONES DE EXPERTOS

El neurólogo Evidelio Carrizo manifestó que los estudios que se adelantan en la UP no solo son una oportunidad para que Panamá tome fuerza internacionalmente como un centro de investigación importante, sino que sería una respuesta a millones de pacientes y familias que sufren los estragos de la enfermedad de Alzheimer.

Ahora, comenta el galeno, es bueno que se adelanten estudios para mejorar la calidad de vida de estos pacientes, pero también es necesario hacer más énfasis en las campañas de prevención para que las personas sepan detectar cuándo están padeciendo los síntomas y decidan asistir a un médico para recibir atención a tiempo. Los focos más comunes de alerta son: dificultad para desarrollar actividades intelectuales en el trabajo, o de vez en cuando, dificultad para reconocer con agilidad a algún familiar. «Si esto ocurre antes de los 50 años no se puede pensar solo en que la causa es por estrés o cansancio».

Por su parte, el neurólogo cirujano Arturo O. Arosemena comenta que si la investigación de la UP es tomada en serio por las autoridades panameñas en conjunto con centro de investigaciones extranjeras se podría pensar que en un futuro estos medicamentos podrían ser mejores y más accesibles económicamente para la población de escasos recursos.

«Se trata de un tratamiento que está en la naturaleza, solo hay que explotarlo, pero para eso se necesitan recursos y es allí donde a veces se estancan las mejores y más prometedoras investigaciones».

Ngobes 515 años después siguen siendo desplazados a la fuerza

Situación Actual del Proyecto Hidroeléctrico Chan-75: construcción avanza gracias a la fuerza policial y no al diálogo

El 8 de noviembre del 2007 se realizó en la comunidad de Charco la Pava un evento en el que estuvieron presentes altos directivos de la ANAM y de la empresa AES Changuinola, junto a representantes de la Defensoría del Pueblo, de la Iglesia Católica y el Sub-Comisionado de la policía de Bocas del Toro, José Manuel Ríos. Durante la actividad, representantes de todas las comunidades Ngöbe que serán inundadas y afectadas por el proyecto hidroeléctrico Chan-75 comunicaron su descontento por la manera en que la empresa estaba llevando a cabo la obra: reubicaciones ilegales, la falta de indemnización por los cultivos destruidos, amenazas y acuerdos forzados. Durante la reunión, ellos pidieron formalmente que se detuviera el proyecto hasta que se investigaran las irregularidades y se garantizara el bienestar de las futuras generaciones Ngöbe.

Esta petición nunca fue respondida, y el 17 de diciembre la comunidad de Charco la Pava se enteró de que dos días después se realizarían explosiones con dinamita en el sitio de represa, a solo metros de distancia de su comunidad. Esta era la última de una serie de vejaciones. Solo semanas antes, los habitantes de la zona habían presenciado como una anciana de la comunidad que allí vivía se había visto obligada ha abandonar su hogar en compañía de fuerzas policiales tras meses de acoso y presión para que cediera sus tierras a la empresa AES. Aunado a esto, el sitio de presa es un lugar con un valor espiritual para algunos ya que en él se encontraban restos arqueológicos de, según ellos, “los indios que vivieron antes que nosotros”. El anuncio de las explosiones en este lugar se convirtió en la gota que derramó el vaso de la paciencia Ngöbe. Así fue como el 19 de diciembre inicia una protesta pacífica contra la construcción. Hombres, mujeres, ancianos y niños se movilizaron al sitio donde se quiere erigir la presa, justo al frente del pueblo de Charco la Pava. La comunidad entera comenzó a vivir ahí: mientras algunos cocinaban y los niños jugaban, otros conversaban y dibujaban pancartas. Las detonaciones y las maquinarias se detuvieron mientras los indígenas esperaban que el Presidente de la República respondiera a sus preocupaciones.

A partir del 26 de diciembre, unidades de la policía, uniformados y en civil, empezaron a ir de casa en casa preguntando por la identidad de todos los presentes. Varios de los líderes se vieron obligados a esconderse. Todavía no se sabe quien dio esta orden y bajo que cargo legal. Finalmente, el 29 de diciembre llegó una autoridad gubernamental al campamento de protesta. Pero en lugar de llegar el Presidente, o algún ministro o diputado, para dialogar con los Ngöbe, llegó la alcaldesa de Changuinola, Virginia Ábrego, con 20 policías y un ultimátum: abandonar la protesta inmediatamente o enfrentar la fuerza de la policía. Adelaida Miranda, testigo de este evento nos cuenta:

llegó la alcaldesa agresivamente, llego ni siquiera escuchaba a nadie, agarró al Sr. Francisco [regidor de Charco la Pava ] a insultarlo, a decirle barbaridades, como uno regaña a un niño, ni siquiera a un hijo uno lo regaña así. Hasta vulgaridades les dijo a la gente. Luego dijo que si no se iban se ateniera a las consecuencias

Gracias quizás a los días festivos no hubo una confrontación inmediata. Pero el miércoles 2 de enero varios periodistas y corresponsales de Bocas del Toro trataron de entrar a la zona para cubrir la protesta. Sin embargo, al llegar a la comunidad de Ojo de Agua, punto de entrada a la zona de construcción, se encontraron con una garita donde un agente de seguridad de la empresa AES, acompañado por dos miembros de la policía nacional, les impidió el paso bajo el argumento que había ocurrido un derrumbe y no era seguro para ellos. Diez minutos después, 5 camiones con policías antimotines pasaron frente a los periodistas, por el mismo camino donde se encontraba el supuesto derrumbe. Al ver esto, los comunicadores sociales empezaron a llamar a las oficinas de la empresa AES y a diversos conocidos insistiendo en su derecho a poder entrar en el área y cubrir lo que sucedía. Solo, se les permitió entrar cinco horas mas tarde, cuando la comunidad se había retirado pacíficamente bajo la promesa de que las obras se detendrían por una semana hasta que se diera una reunión de ellos con las autoridades gubernamentales y representantes de la empresa. (1)

Pero a la mañana siguiente la maquinaria de la empresa empezó a trabajar nuevamente, haciendo caso omiso del acuerdo alcanzado el día anterior. Al ver esto, los indígenas Ngöbe retomaron su campamento comunitario de protesta pacífica. Y esta vez no había periodistas en la zona. Willi Ábrego, nos cuenta como el corregidor de Valle Riscó se dirigió al grupo que protestaba:

pidió que desalojáramos el área, que diera chance, que esa área no es de la gente que pasa por ahí, de los campesino, sino que es el área de la empresa, que nadie tenía que oponer nada en el área de la empresa, y bueno, llegaron los antimotines y nos enfrentaron

Los antimotines, deshicieron el campamento por medio de gases lacrimógenos y fuerza física, sin hacer distinción entre ancianos y niños, hombres o mujeres. Los dirigentes habían ordenado expresamente que no se respondiera violentamente. Roberto Serrano, ayudante de la iglesia evangélica de Charco la Pava comenta como gran número de los manifestantes que eran de la iglesia se arrodillaron y rezaron pero “ ellos no tuvieron misericordia de nosotros ”. Al final del encuentro la policía había arrestado a 54 personas, de los cuales 13 eran menores de edad, incluyendo un bebé de 8 meses. Estas personas fueron esposadas y trasladadas a la estación de policía de Changuinola donde permanecieron por 24 horas. Sin embargo, dos de los niños, Lidia Miranda de 12 años e Iván Miranda de 9 años estuvieron separados del grupo principal, presuntamente porque ambos contaban con heridas que debían ser tratadas médicamente: Iván tenia la camisa ensangrentada luego de un golpe con tolete en la nariz, y Miranda tenía el brazo hinchado y con dolor al moverlo.

Ana Castillo, una mujer que perdió toda su cosecha bajo las maquinarias, se encontraba en la protesta con todos sus hijos, incluyendo uno de tres años colgado al cuello. Su testimonio ilustra claramente lo sucedido:

ellos me agarraron a mi con todo y mis niños, y me tiraron al suelo con la rodilla y pisaron mi espalda. Y mi niño estaba chillando, estaba llorando pues, decía mamá mío, mamá, mamá mío, y el no soltaba nada, mi cuello, hasta que el policía agarro mi mano y forzó, forzó pues. Me tiró abajo de nuevo, mi ropa salió por aquí abajo [señala la cintura] y yo no puedo hacer nada con manos porque yo las tenia así ve [esposadas en la espalda] y no podía hacer nada, me desnudó ahí, delante de todo el mundo, y policía y todo. Y me llevo de nuevo y mi bebé estaba todavía aquí, agarrado a mi cuello, el tenía agarrado aquí

Aunque la orden emitida por el Corregidor de Valle Risco era exclusivamente para despejar el campamento que detenía la construcción, algunas unidades de la policía cruzaron el río a la comunidad de Charco la Pava , presuntamente con el apoyo de botes de la empresa. Allí fueron de casa en casa preguntando violentamente por los dirigentes. Ernesto López, maestro de Charco la Pava nos comentó como él y dos compañeros más tuvieron que esconderse en la montaña para evitar ser aprendidos. Nos cuenta que recorrieron senderos durante toda la noche y la mañana siguiente. La policía los siguió con la ayuda de un helicóptero. Tampoco en esta ocasión se sabe quién ordenó realizar esta persecución. En esta zona defender los derechos de las comunidades se ha convertido en un crimen.

Desde ese día la policía ha permanecido en el área, manteniendo distintos puestos de control, deteniendo a aquellos que por algún motivo no dan una explicación “satisfactoria” de sus quehaceres. Impidiendo así la libertad de movimiento a la que tienen derecho todos los ciudadanos. Los miembros de Charco la Pava, Valle del Rey y Nance de Riscó siguen protestando pacíficamente y cada vez que se reúnen llegan alrededor de 50 unidades antimotines a deshacer la manifestación. Estos hechos son una clara violación del derecho a la protesta pacífica estipulado en el artículo 20 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Actualmente la construcción de la hidroeléctrica Chan-75 avanza a costa de la fuerza policial y no gracias a un diálogo abierto y profundo con todos los actores interesados. Es de temer que de seguir así se de una escalada de violencia que polarice aún mas las partes y dificulte la posibilidad de una resolución satisfactoria y pacífica del conflicto. La creación de energía en el país no se puede alcanzar a costa de la sometimiento violento de los pueblos indígenas que pierden sus tierras en proyectos hidroeléctricos sobre los que nunca fueron consultados.

Lucia L. Lasso
Directora Ejecutiva
Alianza para la Conservación y el Desarrollo