Fraude en concesiones en islas

EN APEGO A LAS LEYES.

Sobre el caso de Brisas de Amador

Eduardo Esquivel R.
opinion@prensa.com

He visto con curiosidad el actual “intercambio” de acusaciones y aclaraciones entre la Unidad Administrativa de las áreas Revertidas (antigua ARI) y la empresa llamada Las Brisas de Amador S.A., que construye una especie de resort en la isla.

Una modesta opinión sobre el asunto: lo primero que llama la atención es que esta empresa pretende arreglar sus asuntos legales con anuncios en los periódicos, lo que es insólito en un país donde las normas legales están muy claras.

Está claro que una “concesión” es una cesión por parte del Estado de un área determinada de terreno… por un tiempo determinado. O sea, una especie de alquiler. Es obvio que la persona que concesiona o alquila no es propietaria del terreno ni de las mejoras hechas sobre el. Mal puede, entonces, vender cualquier mejora hecha, ya que legalmente estaría vendiendo algo que no es de su propiedad. Por ejemplo, los corredores norte y sur son concesiones, y en un tiempo determinado revertirán con todas sus mejoras al Estado.

La Unidad Administrativa de los Bienes Revertidos es la autoridad que maneja este caso, mal puede hacer “interpretaciones” de los contratos. Los contratistas deben acatar a la autoridad y responder por las violaciones hechas a los contratos. La famosa “adenda” aprobada por la extinta ARI no tiene ningún valor por no haber sido refrendada por la Contraloría de la Nación, precisamente porque esta pretende cambiar el sentido de la concesión, que impide la venta de propiedades en las áreas concesionadas, lo que es ilegal.

En cuanto a la altura de los edificios, la guía de diseños para el proyecto establece que la “altura máxima” no debe exceder de seis pisos sobre el nivel de la calle del edificio. Pero los edificios son realmente de ocho pisos. La empresa pretende burlar esta norma con una argucia increíble: hizo una rampa–terraplén por detrás del edificio que llega al tercer piso, y alega que esta es la calle, por lo tanto de allí hay seis pisos. No menciona que hay otra calle que pasa por el nivel real del edificio, o sea el primer piso, y está claro en los planos que el edificio tiene ocho pisos, como bien alega la Unidad Administrativa de los Bienes Revertidos. En este lugar, por el cerro adyacente, se podría construir un edificio de 20 pisos, y hacer una rampa–calle al piso 15, y alegar que este solo tiene cinco pisos sobre la calle.

He visto que cuando a un proyecto de estos se le denuncia o acusa de irregularidades, morosidad o violaciones a las normas, su defensa consiste en amenazar con que se atenta contra la “seguridad jurídica” y “ahuyentar las inversiones”, etc. etc. lo que parece dejar temblando a las autoridades.

El autor es ingeniero

Ambientalistas exigen creación de comité

CHIRIQUÍ. Buscan salvar al Pila y demás reservas.

Ambientalistas exigen creación de comité

Quedan en riesgo los humedales de Volcán, el Parque Nacional Volcán Barú y la reserva de Fortuna.

La Unesco presentó un informe en el que considera en riesgo al Parque Internacional La Amistad.

ESPECIAL PARA LA PRENSA/Boris Gómez
AMENAZA. No hay claridad en la definición tenencial de las tierras dentro del parque, tampoco existen suficientes guardaparques.

Boris Gómez
DAVID, Chiriquí.

El pronunciamiento de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (Unesco) fue el detonante para que los grupos ambientalistas en la provincia de Chiriquí alzaran su voz contra la proliferación de hidroeléctricas y las amenazas a las zonas protegidas en el occidente del país.

La Unesco presentó un informe que considera en riesgo al Parque Internacional La Amistad (PILA), declarado Patrimonio de la Humanidad en 1983.

Así lo establece la Unesco luego de analizar en su XXXII sesión realizada en Canadá, en julio pasado, denuncias que presentaron varios grupos ambientalistas al organismo, corroboradas por representantes de la institución que visitaron la reserva natural administrada por los gobiernos de Costa Rica y Panamá.

Damaris Sánchez, de la Fundación para el Desarrollo Integral Comunitario y Conservación de los Sistemas en Panamá (Fundiccep), con sede en Cerro Punta, indicó que no solo el PILA corre riesgo.

“Son diversas las amenazas sobre toda le reserva de la biosfera La Amistad, que incluye además del PILA los humedales de Volcán, el Parque Nacional Volcán Barú, la reserva de Fortuna y los humedales San San Pon Sac en Bocas del Toro”.

No hay claridad en la definición tenencial de las tierras dentro del parque, tampoco existen suficientes guardaparques, la amenaza de la proliferación de hidroeléctricas y el crecimiento de la frontera agrícola son parte de esas amenazas a nuestras reservas, explicó Sánchez.

La publicación del informe de la Unesco coincidió con el inicio del programa en la Universidad Autónoma de Chiriquí denominado Encuentro Cultura de la Naturaleza 2008.

En dicho encuentro los ambientalistas asistieron a la exposición “Comunicación Gráfica y Medio Ambiente”, con la exposición de las viñetas (caricaturas) del dibujante español Andrés Rábago, El Roto, y muestras de la obra Photo Clima, editada por Greenpeace, España.

Hicieron duros señalamientos contra la aprobación de proyectos hidroeléctricos en el marco de la conferencia de Antonio Clement, sobre energías renovables.

“No hay monitoreo del respeto o violaciones a la naturaleza por las autoridades y el Gobierno le ha dejado las manos sueltas a las empresas transnacionales promotoras de hidroeléctricas sin considerar los daños”, aseguró Demetrio Miranda de la Asociación de Ambientalistas de Chiriquí. Esperamos que en el caso del PILA ambos gobiernos se pongan de acuerdo en este caso, explicó el ambientalista.

“Pesa más el interés económico de las transnacionales y los gobiernos no han tenido el personal con calidad técnica ni humana para hacer un balance en este tema”, dijo Miranda.

Raúl Montenegro, ambientalista, estuvo de acuerdo con el conferencista Clement de que el caudal ecológico del 10% dejado por las hidroeléctricas de embalse es ínfimo y están matando muchas especies nativas del lugar.

Ese 10% que se deja en la estación seca no alcanza y se necesita mucha más del 50% del caudal para no afectar a las especies, comentó .