Medida sin precedentes: Venezuela eliminó pesca de arrastre

Venezuela eliminó pesca de arrastre

Yolanda Valery
Yolanda Valery
BBC Mundo, Caracas

Sardinas

La medida busca entre otras cosas promover la pesca artesanal.

La medianoche de este viernes, más de doscientos barcos dedicados a la pesca de arrastre salieron de circulación en Venezuela, cuando entró en vigor una prohibición de esta modalidad de explotación de los recursos marinos.

El ministro de Agricultura, Elías Jaua, había informado una semana antes que no habría más prórrogas, y que a partir del 14 de marzo cesarían todas las operaciones de estas embarcaciones, que atracarían en los muelles y quedarían bajo la vigilancia de las autoridades.

Jaua señaló que con la medida se busca preservar el lecho marino, promover la pesca artesanal, preservar el orden público -ya que, dijo, muchos de estos barcos se dedican al contrabando- y preservar la salud de los marineros, en virtud de que muchos de ellos estaban trabajando en condiciones inadecuadas.

El destino de estos marineros es incierto, aunque el gobierno les ofreció planes para «reciclarse» como pescadores artesanales, agricultores o pequeños empresarios.

Asociaciones de pescadores del occidente del país se declararon «tristes» por la entrada en vigencia de la prohibición, y manifestaron no haber sido escuchadas en sus propuestas para la transformación del sector.

Estos gremios indicaron que unos 50.000 trabajadores, entre marineros y personal de tierra, se quedarían sin sustento, aunque el gobierno señala que el número de hombres de mar no supera los 1.700.

Reconversión o expropiación

En cuanto al efecto que esto tendrá sobre el abastecimiento de pescado, el despacho de Agricultura y Tierras señaló que será mínimo.

El 70% de lo que pescan con arrastre lo venden en altamar, muchas veces de manera ilegal, o lo desechan
Elías Jaua, ministro de Agricultura

«El 70% de lo que pescan con arrastre lo venden en altamar, muchas veces de manera ilegal, o lo desechan», afirmó Elías Jaua, quien indicó que lo que efectivamente llega a los mercados representa sólo el 6% del total de la producción.

Algunas de las embarcaciones podrán operar en otras modalidades. En concreto, son 40 las que estarían en condiciones de reconvertirse para otros usos, con la anuencia de sus propietarios. El proceso de adaptación duraría de 3 a 6 meses.

Aquellas cuyos dueños no se manifestaran a favor de las adaptaciones técnicas, «serán expropiadas para ponerlas al servicio de la pesca socialista», dijo el ministro.

Para el resto de las unidades, se maneja la idea de hundirlas para fomentar la creación de arrecifes.

Redes

200 marineros dijeron querer dejar las redes para transformase en agricultores o ganaderos.

De paso, este mismo sábado comenzarán a operar las dos primeras embarcaciones atuneras «de la empresa socialista del ALBA».

Precisamente, en esa compañía el gobierno estará ofreciendo «cien vacantes en el segundo semestre de 2009». Otros 200 marineros manifestaron su deseo de transformarse en agricultores o ganaderos.

«No los dejaremos desamparados», garantizó Elías Jaua.

Cómo combatir la escasez de agua

Cómo combatir la escasez de agua

BBC Ciencia

Es un recurso esencial para sobrevivir, pero millones de personas alrededor del mundo todavía carecen de agua.

Sequía

En el futuro podrá haber guerras a causa de la escasez de agua.

Y esta escasez se verá exacerbada en los próximos años debido al rápido crecimiento de la población y al cambio climático.

La Organización de Naciones Unidas ya ha advertido que a medida que el planeta se caliente y se seque, podríamos presenciar conflictos y guerras a causa de este recurso.

Para encontrar formar de combatir el problema unos 20.000 expertos, activistas y políticos de más de cien países están reunidos en el Foro Mundial del Agua que se celebra en Estambul, Turquía.

Durante la reunión, organizada por el Consejo Mundial del Agua y el gobierno del país anfitrión, se discutirán los problemas y desafíos que enfrenta el mundo a raíz de la escasez de este preciado recurso.

De hecho, muchos expertos creen que el acceso al agua es uno de los mayores desafíos que enfrenta hoy el mundo.

Desafíos

«Es un asunto sumamente grave», le dijo a la BBC Jon Lane, director ejecutivo del Consejo de Colaboración para Abastecimiento de Agua y Sanidad (WSSCC), una agencia de la ONU que se encarga de llevar agua y sanidad a las comunidades pobres.

Esta conferencia, que se celebra cada tres años, es una buena oportunidad para que los profesionales que trabajan en el sector se acerquen a los políticos, tanto locales como nacionales
Jon Lane, WSSCC

«En años recientes los titulares de los medios se han centrado en el cambio climático, la crisis financiera, la crisis alimentaria».

«Y quienes trabajamos con el agua, pensamos que este recurso está en la base de todos estos problemas que está viviendo el mundo, en particular, lo que se refiere al cambio climático», afirma el experto, uno de los asistentes a la conferencia.

Según el funcionario, el impacto que el cambio climático está teniendo sobre el ser humano está relacionado al agua.

Las cifras que presenta la ONU no son alentadoras.

Según la organización 1.100 millones de personas viven en el mundo sin agua potable.

Cerca de 70% de los abastecimientos de agua se usan para irrigación y gran parte de ésta se pierde antes de que alcance a la planta.

Para el año 2017, dice la ONU, cerca de 70% de la población global tendrá problemas para acceder a agua dulce.

Y para 2025, aproximadamente 40% de la población vivirá en regiones donde escasea el líquido.

Acercamiento

Se espera que la conferencia emita una declaración conjunta sobre formas de combatir estas tendencias.

Pero algunos expertos creen que hay muy poco consenso internacional sobre la forma como se puede atacar la crisis del agua.

Escasez de agua

Para el año 2025, 40% de la población vivirá en regiones donde escasea el agua.

«Esta conferencia, que se celebra cada tres años, es una buena oportunidad para que los profesionales que trabajan en el sector se acerquen a los políticos, tanto locales como nacionales», dice Jon Lane.

«Porque ellos son quienes deben tomar las decisiones sobre la asignación de recursos de agua potable y sanidad».

«Así que a menudo me muestro muy optimista sobre el impacto que se puede tener en estas reuniones», expresa.

Las advertencias que escuchamos, sin embargo, no son tan optimistas.

La Organización de Naciones Unidas advirtió que en dos décadas casi la mitad de la población del mundo enfrentará una escasez grave de agua y como resultado habrá guerras y conflictos.

Y esto se puede explicar porque más de 260 cuencas fluviales alrededor del mundo están compartidas por dos o más países.

Según Jon Lane, varios países ya están manteniendo conversaciones sobre la mejor forma de compartir los recursos de sus ríos compartidos.

«Es un tema muy sensible, pero si analizamos los registros históricos nos damos cuenta de que el agua, en lugar de dividir, ha acercado a los países o regiones vecinas que la comparten».

«Y en la conferencia se está trabajando para buscar formas para que estas regiones colaboren para cuidar juntas sus recursos de agua», expresa el funcionario.

Según Jon Lane, más que el cambio climático, el principal problema hoy en día es el enorme número de personas que está extrayendo agua.

Ése es el principal desafío para evitar la crisis que enfrenta este recurso, afirma el experto.

Exploración minera en cerro Chorcha no tiene EIA

Exploración en cerro Chorcha no tiene EIA

Manuel Paredes LA PRENSA/Archivo

Mónica Palm
UNIDAD DE INVESTIGACIÓN
mpalm@prensa.com

Cuprum Resources Corporation realiza exploraciones mineras en cerro Chorcha, sin contar con un estudio de impacto ambiental (EIA) aprobado.

Algunas de estas exploraciones afectan dos áreas protegidas y de gran biodiversidad: el Bosque Protector de Palo Seco y la reserva forestal de Fortuna.

La Dirección de Evaluación y Ordenamiento Ambiental de la Autoridad Nacional del Ambiente (Anam) indicó ayer que el EIA categoría I –el más laxo de todos, puesto que no exige consulta ciudadana– que Cuprum presentó en diciembre de 2008, está pendiente de aprobación.

Cuprum recién presentó el EIA, a pesar de que su concesión minera está vigente desde el 4 de abril de 2006. La concesión para explorar 24.2 hectáreas es por cuatro años, renovables.

La Alianza para la Conservación y el Desarrollo denunció ante la Anam que los trabajos de exploración los realiza la empresa Dominion Minerals Corporation, quien tiene un “acuerdo” privado con Cuprum para adquirir hasta el 75% del proyecto en cerro Chorcha.

El ejecutivo principal (CEO) de Dominion es Manuel José Paredes, quien, como viceministro de Comercio, entregó la concesión a Cuprum en 2006.

Trabajos en cerro Chorcha son ilegales

Mónica Palm
mpalm@prensa.com

La Alianza para la Conservación y el Desarrollo ha requerido a la Autoridad Nacional del Ambiente, que dirige la ministra Ligia Castro, que investigue las “exploraciones ilegales” que desarrollan Dominion Minerals y Cuprum Resources Corporation –una subsidiaria de Bellahaven Copper & Gold–, en la provincia de Chiriquí, y la comarca Ngöbe Buglé, específicamente, en el área de cerro Chorcha.

Estos trabajos de exploración mineral se dan en un área en la que confluyen el Bosque Protector de Palo Seco y la Reserva Forestal de Fortuna, detalló Ariel Rodríguez, secretario de asuntos ambientales de la Alianza.

“¿Cómo es posible que se realicen concesiones mineras en áreas prístinas, protegidas y frágiles en cerro Chorcha, sin haber realizado una evaluación estratégica de la política minera en Panamá, como lo manda la legislación ambiental vigente”, se preguntó Rodríguez.

En diciembre, Cuprum presentó un estudio de impacto ambiental, que Anam todavía no ha aprobado.

Hace un mes, Rodríguez solicitó a Castro que multara a los responsables de estos trabajos, que suspendiera cualquier actividad en el área y que solicitara una investigación por delitos ambientales al Ministerio Público. El biólogo no ha obtenido respuesta alguna por parte de Castro. Este diario tampoco pudo hablar con la ministra, pese a que se le dejaron dos mensajes.

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ADEMÁS:  Revise los planes mineros en Cerro Chorcha

http://www.bellhavencg.com/inc/projects/cerro-chorcha/94-maps-cerro-chorcha.html
http://www.dominionminerals.com/Projects/Cerro/

…“aquí casi todo el mundo recibe plata de esta gente”

El Estado, ausente en disputa entre indígenas y multinacional

Goliat genera energía

Comunidades amenazadas por el megaproyecto hidroeléctrico de AES Changuinola

AVANCE. Los trabajos de construcción del dique principal de Chan 1 van a toda máquina. ESPECIAL PARA LA PRENSA/Paco Gómez

Paco Gómez Nadal
CHANGUINOLA, Bocas del Toro

nacionales@prensa.com

Hay 112 escalones que separan a la comunidad de Charco La Pava del imponente río Changuinola. El aliento no alcanza para el caminante urbano, pero el empinado reto no logrará evitar que esta comunidad quede anegada cuando la represa que se construye a escasos 300 metros entre en operación.

Cuando esto ocurra, la comunidad habrá sido trasplantada a la loma de un cerro que alcanza a divisarse desde el caserío actual. Estará a unos 20 minutos a pie del agua y a una derrota de su tradición, de su forma de vida.

Alrededor de Charco La Pava, AES Panamá –la principal empresa generadora de energía en el país– avanza a pasos de gigante en su proyecto de Hidroeléctrica Chan 75 (Ahora Chan 1) y, a cada paso, las tensiones con y entre la comunidad crecen alimentadas a punta de salarios y discursos.

Algo más de 563 millones de inversión, unos 900 trabajadores, campamentos para sus técnicos que se parecen a los enclaves en la antigua Zona del Canal y… un “pequeño” problema: las comunidades indígenas ngöbe como Charco La Pava, Guayabal, Lazo o Valle del Rey, entre otras. Según los datos de AES, 159 familias con 800 miembros cuyas tierras quedarán dentro de las mil 394 hectáreas que serán anegadas.

Desde hace cuatro años, la empresa ha jugado a dividir la comunidad y desde entonces el pleito ha pasado de las palabras a los enfrentamientos violentos, por la represión policial [la empresa tiene un contrato de prestación de servicios de seguridad con la Policía Nacional] y llegando a la visita de James Anaya, relator especial de Naciones Unidas para los Derechos y Libertades Fundamentales de los Pueblos Indígenas el pasado 29 de enero. “Desde que vino Anaya, la empresa presiona un poco menos”, explica Bernardino Tera, de Guayabal. “Bueno, en realidad han cambiado la técnica, ahora utilizan gente de la misma comunidad para convencer y presionar a los que no le vemos el beneficio al proyecto”.

No opina lo mismo Thais Mejía, actual enlace de AES con la comunidad. “No se crean que ese señor [Anaya] les va a solucionar algo, es con nosotros con quien hay que negociar”. Sus palabras se escuchan en el precario salón de la escuela de Charco La Pava donde varios empleados de AES y funcionarios de diversas instituciones del Estado se reúnen con algunos miembros de la comunidad favorables al proyecto. La negociación se acaba cuando se trata de lo que AES denomina Reasentamiento Participativo. “Lo que sí les digo es que el reasentamiento va por que va. Vamos atrasados y no vamos a parar porque tres o cuatro personas no estén de acuerdo”. Concluye “la licenciada”.

A pocos metros de la escuela, Rafael Ábrego, uno de los que se enfrenta a AES mantiene otra versión de la historia. “Ellos nos desprecian, nos dicen que vivimos sucios, entre los animales y la basura, en casas feas… Nos quieren meter en casas de bloque, lejos del río”. Desde el lugar donde está sentado Rafael y Amelia Pineda –otra líder contundente en su posición– se pude ver el incómodo camino de piedritas hecho por AES como aporte a la comunidad. “Debe ser para no mancharse ellos cuando vienen, nosotros vamos con botas de caucho”.

Desde Charco La Pava se pueden ver las obras del dique principal de 99 metros de altura. La devastación es evidente. Ahora, unas 40 personas de las comunidades trabajan temporalmente para AES. Se pasean por el área con casco y chaleco, pero con muy pocas funciones. “Engañan a unos porque son analfabetos o no hablan español. A otros, los compran por un salario, aprovechando su pobreza”, se lamenta Ábrego.

El caso simbólico que muestra AES de estos reasentamientos “participativos” es el de Isabel Beker. De hecho, en su sitio web la ponen como ejemplo de mejora de calidad de vida. Cuando James Anaya visitó a la señora, el símbolo no cumplió con el guión y contó que quiere volver a Charco La Pava y cómo la forzaron abandonar el terreno en el área de la represa.

Valentín Pineda, administrador regional de la Autoridad del Ambiente en Bocas del Toro, cree que debido a lo “conflictivo” del proyecto la mayoría de las delegaciones provinciales del Gobierno central “no han sido suficientemente beligerantes”. En Chan 75 “se dejó la parte social para el final y tuvimos que jalarle las orejas a la empresa”, continúa Pineda quien al final reconoce que, en cualquier caso, sus competencias son limitadas. “Hay decisiones que se toman en Panamá”.

La ausencia del Estado en estos conflictos es evidente. Las comunidades deben negociar por su cuenta y eso las deja en clara desventaja. En el caso de Charco La Pava la desconfianza de los habitantes ante cualquier extraño es contundente. Llegar allá es difícil, porque la empresa controla la carretera pública y registra e interroga a todo aquél que quiera entrar a la zona. Ganarse la confianza de los habitantes es igual de difícil.

Los indígenas ngöbes saben que esta pelea les toca solos. En Charco La Pava, Ernesto López está seguro de que la comunidad tendrá que tomar otra vez “medidas de fuerza”. “El Gobierno está para ayudar a la empresa y en Changuinola todos los medios de comunicación están comprados… no quedan muchas alternativas”. Una mirada que confirma un periodista local en Changuinola, aunque pide el anonimato por miedo a represalias: “aquí casi todo el mundo recibe plata de esta gente”. Un único cabo suelto para Goliat: la diminuta población que sigue oponiéndose a reasentamientos o a compra de tierras.