23 de marzo – Día Nacional de los Bosques Urbanos

23 de abril – Día Nacional de los Bosques Urbanos

Burica Press, 22 de marzo. Instaurado desde hace 5 años el Día Nacional de los Bosques, intenta ser un día de acción y reflexión sobre la naturaleza y existencia de los bosques naturales dentro o en los alrededores de las ciudades de Panamá.

La ciudad de Panamá es la ciudad más grande y poblada del país y es la única ciudad que conserva muestras valiosas de bosques urbanos, especialmente en los territorios donde estuvo asentada la denominada Zona del Canal, administrada por el gobierno estadounidense durante gran parte del siglo XX. Esta zona mantuvo un plan urbano ligado a la conservación de los bosques y una planificación de baja densidad con generosos espacios verdes para conservación y para esparcimiento. Esta área realmente era un Estado dentro de otro Estado en términos políticos. En este escenario político, luego que Estados Unidos debió devolver estas tierras al Estado Panameño, Panamá recibió valiosas tierras para múltiples usos, entre ellos los bosques naturales.

Mapa OSM de los Bosques Urbanos de la Ciudad de Panamá

Los bosques de mangle (manglares) son un ecosistema marino costero que tienen las ciudades de Panamá, Colón y David. En las ciudades de Panamá y Colón han sido fuertemente destruidos en las últimas 2 décadas. En David también ha habido destrucción de bosques, pero no por presión urbana, sino por presión de la agricultura extensiva. Los manglares son considerados como bosques urbanos si están dentro o en la periferia inmediata de una ciudad.

 

Parque Metropolitano

El Parque Natural Metropolitano es un bosque urbano y es hoy uno de los principales centro de educación ambiental para los ciudadanos de la ciudad de Panamá. Este bosque ha estado sometido a presiones urbanas que le han desmejorado su calidad ecosistémica, especialmente con la creación del Corredor Norte (autopista) y las ampliaciones de vías en los otros linderos de este parque.

 

Clayton

Los bosques urbanos de las áreas revertidas están bajo fuerte presión urbana. Ya varias decenas de hectáreas han sido destruidas para construir urbanizaciones y otro tipo de edificaciones. Muchos de los bosques que muestra esta imagen de satélite ya no existen en el presente (2013).

 

Los Rios

El modelo de urbanismo que reemplaza los bosques urbanos es completamente absurdo, pero le rinde frutos financieros a bancos y empresarios que sin escrúpulos y muchos agujeros legales y en otros casos con flagrante corrupción, obtienen permiso de construcción sobre los bosques urbanos.

 

Cerro Ancon

El Cerro Ancón es el área con bosque urbano rodeado completamente por la ciudad. Es una isla verde de inmenso valor histórico y natural. La riqueza biótica de estos bosques contiene especies de gran significado para la conservación como el venado colablanca, el mono tití y los perezosos, entre otros.

 

Farfan

El sector oeste del Canal del Panamá contiene invaluables bosques urbanos desde la misma orilla del mar hasta el centro del istmo a lo largo del Canal de Panamá. Actualmente se encuentra amenazado, ya que es una apreciada área para los empresarios que desean construir más residenciales y nuevos polígonos industriales. La fragmentación de estos bosques se ha acelerado grandemente en los últimos 10 años.

 

Howard y Arraijan

Los bosques del oeste del Canal de Panamá, como el de la imagen alrededor del aeropuerto de Howard, son fuertemente codiciados como nuevos sitios para ser ocupados. Desde Arraiján en el extremo oeste o desde la ciudad de Panamá las presiones sobre estos bosques pueden llevarlos a su destrucción lenta, pero en constante avance.

 

Colon

La ciudad de Colón también tiene invaluables bosques urbanos que le dan buena calidad de vida, belleza urbanística y esparcimiento a los colonenses. Al igual que en la ciudad de Panamá muchos de estos bosques han desaparecido y su suerte es incierta.

 

Pedregal David

La ciudad de David ya no tiene bosques naturales de tierra firme. Sólo le quedan bosques de manglares en el extremo sur. Las ciudades que pierden sus bosques terminan siendo ciudades con poca calidad de vida o de poco atractivo urbano, como es el caso de la ciudad de David.

 

El primer bosque revertido a Panamá fue el bosque del Cerro Ancón el 1 de septiembre de 1979. Como símbolo de soberanía se erigió allí una bandera gigante que hoy ondea como símbolo de soberanía en la antigua Zona del Canal. En el período comprendido entre el 1 de septiembre de 1979 y el 1 de septiembre de 1999, Panamá recibió todas las tierras de la Zona del Canal. El mayor tesoro natural recibido dentro de estas tierras fueron los bosques naturales que se extendían como una solo unidad desde el Pacífico de Panamá hasta el Caribe.

El gobierno de Panamá a lo largo de todo este tiempo hasta el momento ha cedido a presión social y la presión corporativa y ha permitido que una enorme extensión, no cuantificada con exactitud, ha sido transformada en áreas residenciales tanto para gente humilde como para especuladores inmobiliarios de todo tipo. Se han hecho modificaciones legales para permitir la venta y posterior destrucción de los bosques urbanos, que son altamente codiciados por los empresarios ligados a los negocios de bienes raíces e inmuebles.

Cuatro ciudades del país también tienen muestras de bosques urbanos de ecología marino costera, denominados manglares: Bocas del Toro, Panamá, David y Colón. En Colón y Panamá los bosques de manglar están siendo literalmente diezmados en la última década. En la actualidad una gran porción de los manglares y humedales de la ciudad de Panamá entre el centro y el aeropuerto internacional de Tocumen están siendo transformados en nuevas edificaciones residenciales e industriales.

El Estado ha sido poco efectivo en salvaguardar la integridad de todos estos bosques urbanos. La corrupción que subyace de fondo impide el ejercicio transparente de la ley y por ende el respeto a los bosques urbanos.

Desde los gobiernos militares de los años ochenta (1980’s) hasta el actual (2013) han sido permisibles con la destrucción de los bosques urbanos. Una cantidad no cuantificada de bosques han sido vendidos con finalidad de desarrollar proyectos inmobiliarios. «Un tesoro natural de los panameños, como son los bosques urbanos, es sólo un negocio más para muchos de los gobernantes. Esto indica que su cociente de inteligencia y su compromiso generacional, sólo la utilizan donde suenan monedas», asegura José Buendía (nombre ficticio) una activista ambiental consultado.

Lo que dice el ciudadano

En la redes sociales, se transmiten mensajes de algunos ciudadanos que han sido testigos de la destrucción de bosques urbanos: «Por un año estuvimos haciendo educación ambiental. Nos unimos como comunidad e intentamos proteger este bosque, el CL – 43 (un bosque urbano en el centro de Clayton). Sin embargo, la codicia, la desinformación de los que toman decisiones ganó. Hoy, lo que fue el hogar de cientos de aves, perezosos, coatíes y demás será otro residencial más, seguramente tendrán nombres como Green Forests, Green, Forst Hills, Ecovillage … Todo es contradicción y hipocresía»

«Lastimosamente la codicia ciega a muchos, ignorantes se les debe llamar a estas personas que por unos reales vende el patrimonio natural de todos y de futuras generaciones», indica otro ciudadano.

«Área Verde Urbana según Ley 21 de 1997 de áreas revertidas. Me duele mucho esto. Me hace sentir que los bribones y depredadores tienen el control del país, no importa quien gobierne. En esto están implicados funcionarios de todos los niveles desde la antigua ARI, luego MEF, MIVI, ANAM, Corte Suprema, etc»; indica otro cibernauta.

De espalda a los bosques

«El tiempo transcurre, los bosques urbanos siguen amenazados. Los políticos parecen estar lejos de comprender el concepto de sostenibilidad y conservación  como una estrategia de desarrollo, y en el caso de los bosques, no es diferente su falta de visión», enfatiza Buendía al respecto.

Panamá solicitó a la CIDH suspender medidas cautelares impuestas en el 2009

Gobierno de Panamá solicitó a la CIDH suspender medidas cautelares impuestas en el 2009

Burica Press, 20 de noviembre de 2011. El gobierno de Panamá ha solicitado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organismo autónomo en el seno de la Organización de los Estados Americanos, que desista de imponer medidas cautelares al Estado Panameño sobre el caso de los indígenas ngabes afectados por el proyecto hidroeléctrico Chan 75, ejecutado por la empresa AES Corporation con sus filiales locales AES Panama y AES Changuinola.

Según la nota del gobierno panameño, ellos ahora están desarrollando la promoción, protección y respeto de los derechos humanos como un asunto de Estado y una política pública de la administración del Presidente Ricardo Martinelli Berrocal.

Según la cancillería panameña, en la actualidad el Gobierno Nacional está procurando la búsqueda de consenso y el rescate de la confianza de las poblaciones originarias a través de escenarios propicios para el diálogo.

En marzo de 2008, durante la administración de Martín Torrijos, varias organizaciones nacionales e internacionales denunciaron ante la OEA, la violación flagrante de los derechos humanos de las comunidades indígenas asentadas en el valle medio del Río Changuinola. La denuncia se sustentó en que el Estado panameño, de facto, adjudicó estas tierras indígenas dentro de una concesión otorgada a AES Corporation para que desarrollaran el proyecto hidroeléctrico Chan 75. Los indígenas fueron desalojados poco a poco del área a la fuerza o con intimidaciones y con otras acciones contrarias al reconocimiento de los derechos humanos de pueblos indígenas, con tal de avanzar sin contratiempos en el proyecto hidroeléctrico en cuestión.

Ante tal situación en junio de 2009 y luego de un estudio exhaustivo del caso, la CIDH otorgó medidas cautelares al Estado panameño. Tanto la administración de Martín Torrijos, como la de Ricardo Martinelli han ignorado dichas medidas e hicieron avanzar el proyecto y el desalojo completo y sin opciones a los indígenas residentes de la zona de construcción, operación e inundación del gran complejo hidroeléctrico denominado Chan 75.

La administración de Martinelli argumenta en su solicitud a la CIDH que al dictarse las medidas cautelares, no se cumplió con los requisitos establecidos en el Artículo 25.1 del Reglamento de la Comisión Interamericana ni con el inciso 8 de este mismo artículo 25, que faculta a la Comisión para «requerir a las partes interesadas información relevante sobre cualquier asunto relacionado con el otorgamiento, observancia y vigencia de las medidas cautelares», no sólo por una vez, sino cuantas veces lo requiera a fin de verificar específicamente, el cumplimiento de los requisitos de gravedad, urgencia, inminencia e inmediatez de violaciones a derechos fundamentales y así evitar daños irreparables a las personas.

Las medidas cautelares solicitadas en el año 2009 fueron:

1-) Suspender las obras de relacionadas con la concesión otorgada a AES Changuinola en la provincia de Bocas del Toro,
hasta tanto los órganos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos adopten una decisión definitiva sobre el asunto planteado en la Petición P-286/08, en la cual se alega presuntas violaciones a los derechos consagrados en los artículos 5,7,8,13,19,21,23 y 25 de la Convención Americana de Derechos Humanos.

2-) Adoptar las medidas que sean necesarias para garantizar la libre circulación, la vida y la integridad personal de los miembros de la comunidad Ngobe con el fin de evitar actos de violencia o medidas intimidatorias adicionales.

Presa Chan 75 en el noroccidente de Panamá. En mayo de 2011 se inició el proceso de cierre de la presa Chan 75. Muchos indígenas que resistieron hasta el final la lucha jurídica por sus territorios, tuvieron que abandonar definitivamente el área ante el avance de las aguas. Foto: ACD

Según las organizaciones peticionarias de la intervención de la CIDH en este caso de violación a los derechos humanos de comunidades indígenas, el sólo hecho de haber tenido que recurrir a la CIDH demuestra hasta la fecha, que en realidad el Estado Panameño nunca le ha garantizado los derechos a las personas afectadas, tanto así que sigue negando que hayan incurrido en violaciones a los Derechos Humanos. Argumentan que la Corte Suprema de Panamá, todavía mantiene engavetado el caso, a pesar de tener varios años para dilucidar las demandas.

La Corte Interamericana de Derechos Humanos, ya ha indicado que las medidas cautelares impuestas carecían de urgencia, pero ello no implica la negación de la validez del argumento de fondo planteado por los afectados y las organizaciones demandantes.

El gobierno panameño al no acatarlas, hizo avanzar de facto con la obra, a pesar de las numerosas irregularidades ambientales, sancionadas parcialmente por la Autoridad Nacional del Ambiente, y de la violación a los derechos humanos que ha sido corroborado por numerosas organizaciones nacionales e internacionales que han estudiado el problema, incluyendo el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Pueblos Indígenas.

En mayo de 2011 se inició el proceso de cierre de la presa Chan 75. Muchos indígenas que resistieron hasta el final la lucha jurídica por sus territorios, tuvieron que abandonar definitivamente el área ante el avance de las aguas.

ONU: 2011, Año Internacional de los Bosques

2011, Año Internacional de los Bosques

La ONU impulsará diversas iniciativas para frenar el creciente deterioro de los recursos forestales del planeta

Los bosques tendrán en 2011 su Año Internacional. La Asamblea General de las Naciones Unidas organizará diversas actividades para concienciar a la sociedad de los problemas que sufren los recursos forestales de todo el planeta y frenar su deterioro. Cada año desaparecen más de 13 millones de hectáreas de bosques en todo el mundo, una superficie equivalente a la cuarta parte de la península Ibérica. Los consumidores pueden asumir varias medidas para combatir esta deforestación, que afecta a la biodiversidad y al bienestar de miles de millones de personas.

Objetivo del Año Internacional de los Bosques

El Año Internacional de los Bosques pretende llamar la atención de todos los ciudadanos del mundo durante 2011. Su objetivo es aumentar los esfuerzos de recuperación y conservación de las masas arbóreas mundiales y recordar que son parte esencial del desarrollo sostenible del planeta, gracias a los beneficios económicos, socioculturales y ambientales que proporcionan.

Sus responsables realizarán a lo largo de todo el año diversas actividades para implicar a instituciones, empresas y ciudadanos y llamar la atención sobre las mayores amenazas que sufren los recursos forestales. Se promoverán iniciativas para aumentar la ordenación sostenible, la conservación y el desarrollo de todo tipo de bosques, incluidos los árboles fuera de ellos. Además, se intercambiarán conocimientos sobre estrategias que han frenado la deforestación y la degradación forestal.

Con esta edición, será ya la segunda que los bosques son protagonistas de un Año Internacional: en 1985 el Consejo de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) pidió a sus Estados Miembros que tomaran conciencia de la necesidad de proteger esta parte esencial de la naturaleza.
Por qué hay que proteger los bosques

Según estimaciones de la FAO, cada año desaparecen más de 13 millones de hectáreas de bosques en todo el mundo, una superficie equivalente a la cuarta parte de la península Ibérica. Los expertos señalan diversas causas, todas ellas provocadas por los seres humanos: la sobreexplotación y la tala ilegal, la conversión a tierras agrícolas y ganaderas, la recolección insostenible de la madera, la gestión inadecuada de la tierra, la creación de asentamientos humanos, las explotaciones mineras y petrolíferas, la construcción de embalses y carreteras, las especies invasoras, los incendios forestales, los cultivos para agrocombustibles, la fragmentación de los ecosistemas o la contaminación atmosférica.

Mención aparte merecen los bosques vírgenes conservados en su estado original, que desaparecen a gran velocidad en todo el mundo. Conocidos como bosques primarios, cubren un 10% de la superficie terrestre, aunque se estima que cada año se pierden o modifican unos seis millones de hectáreas. La organización ecologista Greenpeace asegura que solo se conservan el 20% de los bosques primarios originarios, que el 80% ya se ha destruido o alterado y que el 20% restante está en peligro. Por su parte, los árboles singulares, algunos con más de mil años de edad o del tamaño de un rascacielos, tampoco disfrutan de una mejor situación.

En España, la mitad de la superficie forestal está desarbolada y la actividad humana amenaza la calidad biológica de los bosques que perviven. Así lo señala el informe «Los bosques que nos quedan. Propuestas para su restauración», elaborado por expertos de la organización conservacionista WWF y de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM).

Los bosques son mucho más que madera. Más de 1.600 millones de personas en los países más pobres del mundo sobreviven por los alimentos, los materiales, el agua o las medicinas que consiguen gracias a ellos. Algunos son pueblos indígenas únicos en peligro de desaparición. Además, son el hogar del 80% de la biodiversidad mundial de plantas y animales y, por ello, su destrucción pone en peligro la supervivencia de muchas especies. Los bosques tropicales son el caso más extremo, debido a la gran cantidad y variedad de seres vivos y a las deforestaciones masivas que padecen.

Los recursos forestales juegan también un papel clave en el cambio climático. Los árboles son uno de los principales sumideros de carbono, al absorber el dióxido de carbono (CO2). Por ello, la deforestación causa hasta un 20% de las emisiones mundiales de CO2, una cifra similar a la generada por el sector del transporte, según datos del Banco Mundial.
Qué pueden hacer los consumidores

Todavía hay tiempo de actuar. Los bosques cubren más del 30% de todo el territorio mundial y contienen más de 60.000 especies de árboles, muchas de ellas todavía sin descubrir. El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) ha calculado que para compensar la pérdida de árboles sufrida el decenio pasado habría que repoblar un área equivalente a la superficie de Perú con unos 14.000 millones de árboles anuales durante diez años consecutivos.

Los consumidores pueden contribuir a recuperar la masa boscosa del planeta de diversas maneras. La más activa es plantar un árbol con sus propias manos. La pionera en este sentido fue la Campaña de los mil millones de árboles, promovida por la Premio Nobel de la Paz Wangari Maathai. En España, iniciativas como las de la Fundación Más Árboles, Apadrina un árbol, Acciónatura, Ecologistas en acción o Arba también instan a los ciudadanos a que contribuyan a la reforestación del planeta. Otra opción es ayudar a las asociaciones ecologistas o que trabajan con árboles, aprender más sobre ellos y apreciar su importancia, o denunciar posibles casos de talas indiscriminadas o cualquier otro problema que les afecte.

Los consumidores también pueden presionar a las instituciones para que emprendan medidas que defiendan los bosques, como la creación de espacios protegidos y corredores entre estas áreas, el apoyo a prácticas eficientes y una gestión forestal sostenible o la repoblación con especies autóctonas de las zonas deforestadas.

Pueden asumir hábitos de consumo que eviten la utilización insostenible de los bosques. Se puede empezar por aplicar las tres erres (reducir, reutilizar y reciclar) en los productos procedentes de la madera y otros involucrados en la deforestación, como los combustibles o los productos agroganaderos. También es posible consumir productos con etiquetas ecológicas (en el caso de la madera, el sello FSC) o realizar actividades de ecoturismo.

Fuente: http://www.consumer.es/web/es/medio_ambiente/naturaleza/2010/11/24/197304.php

Bosque Húmedo Tropical semicaducifolio del Parque Natural Metropolitano, pulmón verde de la ciudad de Panamá

2010: Año Internacional de la Biodiversidad llega a su término

El Año Internacional de la Biodiversidad llega a su término; hubo logros alcanzados y nuevas perspectivas para la conservación de la biodiversidad en los próximos años. Ha habido nuevos compromisos de alto nivel, pero se duda de acciones concretas. La valoración económica de la biodiversidad parece un camino a seguir desde la perspectiva de los grandes tomadores de decisión. Europa lidera esta iniciativa.

A nivel mundial se ha celebrado los resultados de la conferencia del Convenio sobre la Diversidad Biológica, que se reunió en Nagoya, Japón, a finales de octubre. Los gobiernos aprobaron un “gran plan” de diez años para restaurar el mundo natural. Un nuevo acuerdo sobre el manejo de los recursos genéticos del planeta representó un hito importante, y se avanzó hacia la concertación de un nuevo acuerdo para financiar la conservación de la biodiversidad.

Ahora nos corresponde ver el resultado real en las áreas protegidas, las especies y hábitats amenazados, la financiación de la conservación, entre otras cosas.

Esperanzas tenemos y ojalá no se desvanezcan en el camino.

Burica Press

Dos carreteras amenazan corredor biológico del Caribe y Parque Internacional La Amistad

Es evidente que estas carreteras intentan hacer un flaco favor de acceso a companías mineras en el corredor costero del caribe y a las hidroeléctricas en el valle del Río Changuinola.

Estos diputados y el gobierno demuestran que son un verdadero peligro ambiental en sus posiciones de tomadores de decisión.

Burica Press.

La construcción de mega proyectos reactivará la economía bocatoreña

Publicado en junio 08, 2010 15:14
La construcción de mega proyectos reactivará la economía  bocatoreña

Periodista: Jaime Marthe

  • Se construirá un acueducto en Almirante por B/.5.5 millones
  • Se edificará un nuevo aeropuerto internacional
  • Se destinarán 150 millones de balboas para la carretera costanera
  • Se utilizarán 7.5 millones de balboas en la compra de terrenos para viviendas
  • Se construirá una carretera costera desde Colón a Bocas del Toro
  • Se construirá una nueva carretera por el Valle del Río Changuinola desde Cerro Punta
“El gobierno nacional ha destinado dentro del presupuesto general del Estado los recursos financieros que permiten la realización de mega proyectos para fomentar el desarrollo sostenible e integral que definirá el presente y el futuro de la provincia de Bocas del Toro”, sostuvo el diputado Mario Miller.
De acuerdo con el diputado, la ayuda que brinda el Gobierno nacional a la segunda provincia en pobreza del país, caracterizada por su potencial de crecimiento, sus abundantes recursos naturales, belleza paisajística y rica diversidad biológica, se evidencia con el inicio de los trabajos de construcción de la planta potabilizadora para el corregimiento de Almirante a un costo de 5.5 millones de balboas.
Duración de los trabajos

Informó que los trabajos de construcción que realiza la empresa Trans Caribe se prolongarán por espacio de once meses, por lo que prontamente se verán cumplidos los anhelos de los moradores de ese corregimiento de contar con el suministro constante del vital líquido para garantizar su salud y bienestar.
Dijo que también se realizan los estudios de factibilidad para construir una nueva toma de agua en Quebrada Carbón, para complementar el acueducto que se edificó en esa comunidad a un costo de 18 millones de balboas y no ha resuelto el problema de falta de agua.
Construcción de una moderna terminal aérea

Reveló que las autoridades gubernamentales gestionan la compra de 20 hectáreas de terreno para la construcción del aeropuerto internacional que contará con todas las facilidades para atender la creciente demanda de turistas, estimada en 150 mil personas que los visitan al año, cuyo acceso se verá beneficiado con la construcción del mega puerto de cruceros que se realizará en la isla de Bocas del Toro.
Dijo que en la actualidad Costa Rica vende sus paquetes de turismo incluyendo Bocas del Toro, por lo que va siendo hora de que el Estado desempeñe el papel que le corresponde e instale la infraestructura necesaria para atender a los turistas y se evite la fuga de divisas.
“El aeropuerto podrá recibir vuelos chárter y reunirá todas las exigencias en materia de seguridad aérea internacional y facilidades para los pasajeros, de forma que los vuelos internacionales se podrán dirigir directamente a Bocas del Toro y no tendrán que realizar escalas en la capital”, expresó.
Dijo que el turista paga para recibir un buen servicio que pronto será posible gracias a la construcción de la moderna terminal aérea.
Proyecciones para la provincia de Bocas del Toro

Expresó que el Ministro de Vivienda, Carlos Duboy, se reunió con el gerente del Banco Hipotecario Nacional, Rafael Guardia, para definir el uso que se dará a los 7.5 millones de balboas que se han destinado para atender el déficit habitacional en la provincia y resolver los problemas de invasión de tierras y hacinamiento.
Adelantó que los planes para la construcción de la carretera costanera, estimada en más de 150 millones de balboas, que se extenderá desde Miguel de la Borda en la provincia de Colón hasta Rambala en Bocas del Toro.

Dijo que también se dio la orden de proceder para realizar los estudios de diseño y construcción de otra carretera que unirá la provincia de Chiriquí por el sector de Cerro Punta y Volcán, hasta el corregimiento de Valle Ricón, en Bocas del Toro, que contará con varios kilómetros de túnel para unir el Atlántico con el Pacífico.

Camino de Cruces amenazado otra vez, en otro frente

AFRENTA A LA HISTORIA

El mercado y el camino colonial

Luis Puleio C.
opinion@prensa.com

La construcción del Mercado de Abastos en el sector del antiguo campo de antenas de Chivo Chivo marcará el principio del fin del Camino de Cruces.

El campo de antenas de Chivo Chivo, hasta la entrada en vigencia de los tratados Torrijos–Carter, era un importante centro de comunicaciones del ejército estadounidense acantonado en Panamá. Con una superficie de 150 hectáreas, el campo era parte del polígono de entrenamiento de la Brigada 193 de Fort Clayton y centro de escucha del sector pacífico del continente.

A pesar de ello, los estadounidenses respetaron el sendero empedrado del Camino de Cruces que, desde el Puente del Rey, construido sobre el río Hondo actualmente río Curundú, era la puerta para llegar o salir de la ciudad de Panamá, después de 1673.

Su eje de marcha, para detallarlo en la actualidad, va desde el cruce del río Curundú pasa por el terreno del museo Reyna Torres de Araúz en altos de Curundú, continúa en dirección al Colegio de Las Esclavas, servidumbre de la Embajada de Estados Unidos, traspatio del Colegio Javier, el Hospital de Clayton, los terrenos en litigio de la compañía Pazco, la calle de la Guanábana, unidad de viviendas de Clayton, internándose en el campo de antenas con destino a la carretera Madden y el poblado de Venta de Cruces en Gamboa, a orillas del río Chagres.

Para ahondar un poco más en la historiografía nacional, es en el campo de antenas donde se pretende construir el Mercado de Abastos de la ciudad, en donde existió el poblado colonial de Guayabal desde el cual el gobernador Pérez de Guzmán planeó la defensa de la ciudad de Panamá contra los piratas de Henry Morgan.

Guayabal fue uno de los tantos sitios de relevo con que contó el camino para el hospedaje y descanso de los viajeros. El explorador Enrique García y el profesor de historia Geovanni Duarte, han realizado la prospección en el área encontrando fragmentos de cerámica de la época.

Doblemente revelador es dar a conocer a la luz pública que, además del Camino de Cruces, en el sitio de Guayabal se entroncaba el camino de Gorgona, una construcción hecha de piedra de río, igual al de Cruces, por los españoles, como ruta directa a dicho poblado asentado algunos kilómetros más abajo del poblado de la Venta de Cruces.

El capitán e ingeniero español Nicolás Rodríguez, en 1735, fue comisionado por su majestad del reino de tierra firme para inspeccionar los caminos de Cruces, Gorgona y Real a solicitud de los comerciantes de Porto Bello y Chagres. El porqué respondía al hecho del peligro que representaba para los bongos, el vencer los rápidos del río Chagres que ocasionaban pérdidas en vidas y mercancías. Por ello se tenía en mente trasladar la Aduana de Venta de Cruces hacia la comunidad de Gorgona por estar ubicada, lejos de la impetuosa escorrentía del río (Informe de inspección del capitán Nicolás Rodríguez, Biblioteca del Smithsonian Institute).

Construir el Mercado de Abastos en el centro del Parque Camino de Cruces generaría el asentamiento paulatino de villas miseria en derredor del perímetro del mercado, donde los pepenadores y los precaristas de toda clase pulularían en el área.

Las aguas negras y la basura se deslizarían hacia los lagos de Miraflores, auxiliares del Canal, y los inversionistas impulsarían proyectos de viviendas, aniquilando el verdor del parque.

En hora buena, el diputado José Blandón adelanta el proyecto de declarar el Camino de Cruces y Camino Real en monumentos históricos de Panamá. La construcción del mercado en ese terral histórico será, a no dudar, una afrenta a la historia nacional que negaría a los panameños el disfrutar y conservar, para las generaciones presentes y por venir, una ruta que le dio la existencia al Panamá de hoy.