En el caso de Red Frog Beach ANAM había ignorado el interés colectivo

ambientalistas ganan puntos con proyecto Red Frog Beach

Anam ignoró interés colectivo

La Sala Tercera de la Corte declaró ilegal una resolución de la Anam al considerar que se violaban normas ambientales y convenios internacionales sobre la protección del medio ambiente.

OBRA. Pillar Panamá, que desarrolla el proyecto Red Frog Beach, planeaba construir una marina que ahora queda prohibida por un fallo de la Corte Suprema. LA PRENSA/Gabriel Rodríguez

JOSÉ ARCIA
jarcia@prensa.com

La Autoridad Nacional del Ambiente (Anam) aprobó el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto Red Frog Beach “desconociendo” no solo los intereses de la comunidad, sino también aspectos “trascendentales” de los impactos ecológicos a corto, mediano y largo plazo que ocasionaría la obra residencial y turística.

Este es parte de los argumentos que los tres magistrados de la Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia –Winston Spadafora, Adán Arnulfo Arjona y Víctor Benavides– presentaron para declarar ilegal la Resolución No. 1A-218-2007 de la Anam, mediante la cual se aprobó el EIA de la segunda fase del proyecto Red Frog Beach en Islas Bastimentos, provincia de Bocas del Toro.

La decisión de los magistrados obedece a una demanda de nulidad que presentó el Centro de Incidencia Ambiental (Ciam) en noviembre de 2007 –a nombre de Rutilo Milton y Delfino Hooker, vecinos del parque– en contra de la resolución.

La demanda se sustenta en que el Gobierno, a través de la Anam, violó legislaciones nacionales e internacionales sobre la protección del medio ambiente.

Entre las normas locales que se infringían se mencionó la Ley No. 41 de 1998, mejor conocida como Ley General de Ambiente, y la Ley No. 24 de 1995 sobre la Vida Silvestre en el país.

En cuanto a normas internacionales, Ciam estimó que la decisión de la Anam violó cuatro convenios ratificados por Panamá sobre la protección de ecosistemas marinos, biodiversidad y cambio climático.

El proyecto cuestionado consistía en la construcción de 700 casas, 7 condominios de apartamentos, un hotel de 4 pisos de hasta 100 habitaciones y 34 villas. Incluía además una marina con capacidad para 250 embarcaciones, estacionamientos y un centro de actividades de tres pisos.

Para Lina Vega, abogada de Ciam, no hay duda de que el proyecto sobrepasaba la capacidad de carga del Parque Nacional Marino Isla Bastimento, creado en 1988.

La demanda se sustentó también en que la Anam ya había sancionado con 130 mil dólares a la empresa Pillar Panamá, que desarrolla el proyecto, por incumplimiento de normas ambientales durante la construcción de la primera fase de la obra.

Otro de los aspectos que Ciam cuestionó era el hecho de que la Anam no tomó en consideración las opiniones de varios grupos sobre los daños ambientales que produciría el proyecto al momento de aprobar el EIA, un aspecto que los magistrados consideraron como parte del incumplimiento, por parte de la Anam, de normas ambientales “en beneficio de un interés particular y en detrimento del interés público”.

“Somos conscientes de que el progreso que involucra el desarrollo turístico de un lugar redunda… en beneficio de la comunidad y del país. No obstante, debe siempre considerarse, al momento de aprobar un EIA, si las repercusiones ambientales representan un peligro para la conservación de un área…”, señala el fallo.

Harley Mitchell, director de Asesoría Legal de la Anam, dijo que el fallo es una herramienta que puede ser utilizada por la entidad para mejorar su gestión ambiental.

A juicio de Mitchell, durante la actual administración de la entidad se han perfeccionado muchas gestiones ambientales relacionadas con las normas.

“Nosotros estamos analizando el fallo y de seguro será útil para las evaluaciones ambientales”, recalcó el funcionario.

Se llamó a la oficina de Pillar Panamá, la responsable del proyecto, en la ciudad de Panamá, pero desde allí se informó que se debería llamar a la oficina de Bocas del Toro para cualquier información sobre el proyecto.

Aunque se llamó al número telefónico proporcionado, la línea siempre estuvo ocupada.

Además se envió un correo electrónico a la jefa de Mercadeo y Relaciones Publicas de la empresa, Michelle Slough, pero no se obtuvo respuesta alguna.

decisión revierte aprobación de la anam

Corte Suprema anula EIA de Red Frog Beach

La Sala Tercera de la Corte Suprema declaró ilegal la resolución que aprobó el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto residencial y turístico Red Frog Beach, ubicado en el Parque Nacional Marino Isla Bastimentos.

JOSÉ ARCIA
jarcia@prensa.com

Una decisión de la Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia tiene celebrando a los conservacionistas.

El pasado 27 de noviembre, los magistrados de la Sala Tercera declararon ilegal la Resolución 1A-218-2007 de la Autoridad Nacional del Ambiente (Anam), mediante la cual se había aprobado el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la segunda fase del proyecto Red Frog Beach.

El proyecto, que se desarrollaba dentro de la zona de amortiguamiento del Parque Nacional Marino Isla Bastimentos, en la provincia de Bocas del Toro, implicaba la construcción de residencias, un hotel, villas y una marina.

El fallo, el primero en contra de una resolución de este tipo, ahora deja prohibida la construcción de las obras, por el momento.

Ambientalistas, científicos y las comunidades aledañas rechazaron la obra por el impacto al ambiente que ocasionaría en el Parque, considerado como uno de los más importantes del Atlántico en Mesoamérica, y que forma parte de la reserva de la biósfera de La Amistad.

La decisión de la Sala Tercera, bajo la ponencia del magistrado Winston Spadafora, surge al resolver una demanda de nulidad que presentó el Centro de Incidencia Ambiental (Ciam) en contra de la resolución.

El proyecto es uno de los que pone en peligro las riquezas marino-costeras, según Ciam. La organización espera que el fallo se convierta en un precedente para obras que atenten contra el medio ambiente.

El director de Asesoría Legal de la Anam, Harley Mitchell, dijo que el fallo es “importante” para la gestión ambiental de la entidad.

Dijo que la empresa debe realizar otro EIA para evaluación, si desea continuar con el proyecto.

La decisión de la Corte Suprema de Justicia de anular la resolución de la Autoridad Nacional del Ambiente (Anam) mediante la cual se aprobó el Estudio de Impacto Ambiental a la segunda etapa del proyecto Red Frog en Bocas del Toro es una buena noticia, en especial por los desatinos que ha cometido con los proyectos mineros en la provincia de Colón.

Después de mucho tiempo, la Corte está dando muestra de estar recuperando la cordura y ciertamente el fallo es recibido con gran beneplácito, pues hace tiempo que no veíamos actuaciones tan firmes. Y más allá de ello, el mensaje está claro para la Anam, que parece más preocupada en proteger los intereses de seudoempresarios que los de la sociedad. Bocas del Toro tiene un enorme potencial que está en peligro por la desenfrenada codicia de personas que solo están interesadas en llenarse los bolsillos.

Lamentable es que los funcionarios de la Anam no se hayan dado cuenta de ello y hayan tenido que hacérselos ver los magistrados de la Corte Suprema y un grupo de ciudadanos interesados en mantener en buen estado nuestra herencia natural.

El Valle, una joya ecoturística

El Valle, una joya ecoturística

Rafael Quezada
Especial para prensa.com

internet@prensa.com

LA PRENSA/R. Quezada

EL VALLE, Coclé. -Oculto entre los verdes paisajes de la provincia de Coclé se encuentra El Valle de Antón, un poblado que se ha convertido en una joya del tesoro ecoturístico de Panamá.

En este pueblo surgen diferentes oportunidades que van de la mano del turismo. Entre ellos figuran los nuevos alojamientos, expediciones a sitios naturales, servicios públicos y facilidad para recorrer el poblado ya sea en autobús, bicicletas, motos o a caballo.

El Valle ofrece además lugares para avistar aves, a las orquídeas, y mantiene la inseparable frescura que rodea a sus barrios y campos.

Gracias a su altura, el clima templado permanece casi todo el año. Esto, sumado a la proximidad a la ciudad de Panamá ha transformado a este pequeño refugio natural en un retiro de fin de semana para muchas personas.

Su impresionante vista geográfica que se forma por la figura del cráter de un extinto volcán que apareció durante la prehistoria es la curiosidad natural que mueve a miles de turistas a trasladarse sin pensarlo dos veces.

Sus paisajes naturales, chorros, travesías en cables, las caminatas, los árboles cuadrados y el surtido de productos y artesanías complementan el atractivo que tiene el poblado.

ALOJAMIENTO

Existe una veintena de sitios que le ofrecen a los visitantes diferentes tarifas de hospedaje.

Y es que la oferta de oportunidades de alojarse en El Valle de Antón sigue expandiéndose, como los hoteles, hostales, cabañas, pensiones, aparta-hoteles y residenciales.

“Esto es bueno, porque los visitantes pueden escoger el lugar que más le agrade”, dice Carolina Navas, directora regional del Instituto Panameño de Turismo en Coclé.

Ejemplo de este fenómeno menciona el caso del hotel Campestre, que ha expandido el área de hospedajes. La medida beneficiará a los que desean hacer reservaciones por anticipado. El hotel Los Mandarinos también ha decidido expandir su edificio que está diseñado al estilo toscano. En 2009, el sitio tendrá dos nuevas torres, con espaciosas habitaciones especialmente para atender a familias con niños.

VISITAS

Marcos Núñez, encargado de la oficina de información del Instituto Panameño de Turismo en El Valle de Antón, estima que entre 10 mil a 12 mil turistas visitan anualmente el lugar.

En lo que va de este año a agosto la cifra ya alcanza los 9 mil turistas, y aún no ha empezado la temporada alta, agrega el funcionario.

LA PRENSA/R. Quezada

Canopy tower, buen ejemplo de sitio de ecoturismo

Ecoturismo

TURÍSMO AL DÍA.

‘Ecolodge’ local, entre los mejores

Canopy Tower ha sido distinguido como uno de los 50 mejores ecohoteles del mundo, por la revista National Geographic Adventure. Otros tres hoteles de Centroamérica recibieron el mismo reconocimiento.

PANAMÁ. Ubicado en el Parque Nacional Soberanía, Canopy Tower fue una torre de radar que los americanos construyeron durante la Guerra Fría para proteger el Canal de Panamá.

ROBERTO GONZÁLEZ JIMÉNEZ
rgjimenez@prensa.com

La edición de noviembre de la revista National Geographic Adventure destaca a cuatro hospedajes de Centroamérica en su ranking “Top 50 Ecologdes (ecohoteles) del Mundo”.

Uno de ellos es el Canopy Tower, la antigua torre de radar que los americanos construyeron durante la Guerra Fría en el Parque Nacional Soberanía para proteger al Canal de Panamá de un posible ataque soviético.

El propietario del ecohotel, Raúl Arias de Para, quien sustituyó los radares que buscaban misiles por binoculares para apreciar aves, señala que sintió “orgullo y satisfacción” cuando le comunicaron la noticia. “Esta es una muestra de la calidad de productos que podemos ofrecer los panameños al mundo”, dijo.

El ranking de National Geographic divide los hospedajes según su entorno. De los que se encuentran ‘en la selva’, la revista destacó 10 hoteles de todo el mundo, de los que cuatro están en esta región: el citado Canopy Tower, Lapa Ríos en Costa Rica, Pico Bonito en Honduras y Chaa Creek en Belice.

Costa Rica

Lapa Ríos es un complejo ecoturístico construido en la punta de la península Osa, al sur de Costa Rica, no muy lejos de la frontera con Panamá.

Hans Pfister, presidente de Cayuga, empresa que gestiona el hospedaje, reconoce que su éxito se debe a la manera “como el hotel logró integrarse sin hacer daño al medio ambiente y ser un beneficio para el desarrollo de la comunidad local”.

La propia publicación afirma en su descripción de Lapa Ríos que “apenas ninguna mata de hierba fue dañada para construir 16 bungalows con techo de paja, muebles de bambú y hamacas con vistas al Pacífico”.

Honduras

En la zona de amortiguamiento del Parque Nacional Pico Bonito, a las faldas de la montaña Nombre de Dios y rodeado de un bosque tropical-lluvioso, se encuentran las 22 cabañas de ‘The Lodge at Pico Bonito’.

Ivonne Acosta, gerente general del ecohotel, interpreta el premio “como una confirmación de que se puede hacer turismo con calidad de primera clase y al mismo tiempo proteger y conservar nuestro entorno natural”.

Belice

En 1981, Chaa Creek se convirtió en el primer ‘ecolodge’ de Belice. Ubicado en las faldas de la montaña Maya, el complejo tiene un sendero de plantas medicinales y una granja de mariposas.

Lucy Fleming, directora general de Chaa Creek , señala que la gestión respetuosa con el medio ambiente “ya no es una opción, sino una responsabilidad; una responsabilidad que el viajero concienciado comparte con felicidad”.

Destino ecoturístico

Este tipo de distinciones ayuda a que Centroamérica se destaque como destino ecoturístico.

Tanto en Honduras como en Centroamérica “hay un producto para ofrecer; hay mucho para ver y disfrutar y eso invita a conocernos”, apuntó Acosta.

Pfister, por su parte, opina que la distinción muestra la fortaleza de Centroamérica como destino y anima a las aerolíneas locales a que ayuden a promover el turismo con una oferta de vuelos a tarifas económicas.

“¡Qué lindo sería para un turista poder recorrer estos cuatro ‘ecolodges’ en unas mismas vacaciones!”, dijo.

Desalojos forzados en islas y costas de Panamá

Alerta por aumento de desalojos en las costas

Desalojo en Pedasí.LA PRENSA/Cortesía/ Augusto López

JOSÉ aRCIA
jarcia@prensa.com

El Consejo Consultivo del Programa Nacional de Administración de Tierras, integrado por la sociedad civil, alertó de desalojos a vecinos de comunidades costeras.

César Carrasquilla, presidente del Consejo, denunció ante la Defensoría del Pueblo una “violación de los derechos humanos” de 33 familias desalojadas en Pedasí, provincia de Los Santos, que tienen más de 30 años de vivir ahí. El Consejo ha recibido unas 500 quejas de diferentes partes del país por avisos de desalojo.

El abogado Guillermo Márquez consideró que los desalojos realizados son “arbitrarios”.

programa de gobierno empieza a incomodar a moradores costaneros

Residentes de las costas, en ascuas por sus tierras

Pequeñas comunidades costeras desaparecen ante el ‘boom’ inmobiliario y turístico. Las casas son derrumbadas y los residentes, desalojados.

PAISAJE. Los terrenos de Donatilo Jiménez llegan a la playa La Colorada, en la costa arriba de Colón, con vistas muy atractivas para proyectos turísticos. LA PRENSA/Maydée Romero

JOSÉ ARCIA
jarcia@prensa.com

Una ola de desalojos inunda las comunidades costeras del país y arrasa, en algunos casos, con cuatro décadas de vida familiar.

La voz de auxilio se escucha tanto en el lado atlántico como en el pacífico. El boom inmobiliario y turístico es la causa, señalan los moradores. Aunado a unas autoridades locales y centrales que “no están reconociendo los derechos posesorios”, añade el jurista Guillermo Márquez Amado.

En medio está el Programa Nacional de Administración de Tierras (Pronat) que busca hacer una titulación masiva. Las comunidades se organizan para protestar en contra de la iniciativa porque, por un lado sus tierras son cedidas a “poderosos” y, por otro lado, el costo para obtener la titulación es “impagable”.

Donatilo Jiménez aún se pregunta cómo la Dirección de Catastro del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) concedió, en abril del año pasado, a la sociedad Hoteles Decameron un globo de terreno en Cocuye, en Santa Isabel de Colón, que él heredó de su padre y que también perteneció a su abuelo.

Después de luchar en contra de la decisión gubernamental, con el apoyo del Consejo Consultivo de Pronat –integrado por la sociedad civil–, el pasado 10 de octubre Catastro revocó la decisión.

Ahora, Jiménez se siente complacido, pero su preocupación sigue latente. Es un área atractiva para el desarrollo turístico, “al que no nos oponemos, pero si desconocen nuestro derecho, lo defenderemos”, dijo.

“Lo que le pasó a Donatilo le puede ocurrir a cualquiera de nosotros”, añade Alfredo Reid, uno de los residentes de Santa Isabel.

Mientras los colonenses respiran, por el momento, con tranquilidad, los residentes de playa El Toro y La Garita, en Pedasí, y la comunidad indígena Cayo de Agua, en el Archipiélago de Bocas del Toro, están en la zozobra.

El pasado 10 octubre, 17 policías llegaron a la comunidad de Cayo de Agua para derrumbar unos 15 ranchos indígenas, habitadas por alrededor de 100 familias, dijo Félix Sánchez.

Seis días después, la misma orden llegó a la costa de Pedasí. Ese día, un grupo de residentes se preparaba para ir de pesca, cuando entró la maquinaria a derrumbar las casas, narró ayer Amada Caballero.

La acción, dijo, es porque ahora aparece un supuesto dueño de una tierra que ha sido ocupada desde hace 40 años por los moradores.

Por este caso, el Consejo Consultivo de Pronat hizo una solicitud a la Defensoría del Pueblo para que investigue, alegando que el programa se ejecuta a través de convenios con el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, que establecieron en sus cláusulas el reconocimiento del derecho de los ocupantes de las tierras. En el documento se advierte de que los desalojos “pueden ser causal del término del financiamiento”.

Este diario intentó contactar a la viceministra de Economía y Finanzas, Gisela Álvarez de Porras, y al coordinador técnico de Pronat, Rolando Armuelles, durante dos días, sin embargo ninguno de los dos respondió.

Promueven ruta ecológica interoceánica

Promueven ‘ruta ecológica’ entre los dos océanos

Panamá / EFE. —Un grupo de seis empresas panameñas de turismo promueve una «ruta ecológica», a través de este istmo que separa dos mares para promover Panamá como destino internacional e incrementar el flujo de visitantes al país, informó una fuente empresarial.

Annie Young, representante del proyecto y también directora de EcoCircuitos Panamá, una de las seis empresas involucradas en el plan, explicó a Efe que la «ruta ecológica» ha diseñado un recorrido por los atractivos naturales del país, cuya diversidad biológica despierta tanto interés como sus playas y parajes tropicales.

El proyecto, indicó Young, incluye visitas a los restos de las fortificaciones españolas en el Atlántico, punto de partida de los tesoros provenientes del sur, hacia España, ahora parte del Parque Nacional San Lorenzo, y al Parque Nacional Soberanía, integrado a la cuenca del Canal de Panamá.

La iniciativa cuenta con la aprobación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que respalda el programa gubernamental de inversión «Impulso Panamá».

«Impulso Panamá» es un programa de competitividad y apertura comercial en el que participan además la cooperación japonesa y el sector privado, al que se dio inicio el 2 de junio pasado.
El cluster de turismo, al que se suma un hotel de la localidad, firmó el pasado 30 de junio el contrato para la financiación no reembolsable del proyecto, cuyo monto asciende a 47,000 dólares, 30% del cual es aportado por las empresas y 70% por el programa.

Según Young, el proyecto de promoción y comercialización de la marca destino «La Ruta Ecológica entre dos Océanos» está dirigido especialmente a los mercados de Europa y EEUU, donde este mes se inició una primera promoción en tres ciudades de California, para presentarla a agentes de viajes y mayoristas. El español Javier Gamundi, director de la alemana «GFA Consulting Group», contratada por el Gobierno para gestionar el programa «Impulso Panamá», señaló a Efe que la «ruta ecológica» es desde el punto de vista de su empresa, «un proyecto magnífico».

Gamundi indicó que este proyecto está entre los nueve que la empresa gestora presentó para su aprobación, seis de los cuales recibieron el visto bueno del BID y tres están por ser aprobados, alcanzando entre todos una suma global de 535,000 dólares.