Promueven energía solar y eólica en Azuero

MEDIO AMBIENTE

Promueven energía verde

Elsa M. González LA VILLA, LOS SANTOS
economia@prensa.com

Un innovador proyecto denominado Sistema Energético para Autoabastecimiento promueve el empresario español Andrés Sánchez en las provincias centrales para generar energía eólica (viento), hidráulica (agua) y fotovoltaica (sol).

Utiliza pequeños aerogeneradores (hélice movida por el viento) que se conecta a redes de baja tensión y produce un máximo de 10 kilovatios, suficiente energía para alimentar el alumbrado y algunos electrodomésticos de una residencia.

Los aparatos se pueden instalar en lugares apartados de las ciudades donde no llega la energía.

También se promueve el desarrollo de la energía hidráulica por medio de una turbina de fácil instalación y que genera 400 wats a una altura de nueve metros, lo necesario para abastecer a una pequeña vivienda.

Otro mecanismo trata de extraer agua subterránea, tanto para el agro como para el consumo hogareño mediante bombas de agua alimentadas por módulos fotovoltaicos o paneles solares.

Sánchez sostiene que en un día soleado, con 10 horas de luz solar la bomba puede sacar hasta tres mil 400 litros de agua subterránea. Esta cantidad es suficiente para suministrar agua a varias familias, 30 cabezas de ganado o para regar 40 árboles frutales.

La aerobomba dispone de una caja de engranajes. Utiliza tubería y varillaje hasta la bomba y tiene una capacidad para extraer unos siete mil litros de agua por hora a una profundidad de hasta 80 metros .

Varios agricultores y ganaderos han visitado a Sánchez para llevar esta tecnología a comunidades apartadas. “Es la primera vez que exponemos este tipo de tecnología en Panamá, pero sí hemos desarrollado proyectos en España con mucho éxito. España es un país electrificado, pero hay pueblos que están deshabitados porque la gente se marchó a las ciudades”, explicó.

Crisis mundial retrasa operaciones de eólicas en Panamá

energía

La crisis retrasa operaciones de eólicas

Algunos de los proyectos en marcha se financian con bancos internacionales que fueron afectados por la crisis internacional.

AL VIENTO. Entre las empresas interesadas en desarrollar proyectos eólicos en Panamá se encuentran Generadora Eólica del Caribe, Southern Energy Wind, Generadora Eléctrica de Panamá, Aerogeneradores Iberoamericanos, AES Panama y Enrilews. EFE

Wilfredo Jordán S.
wjordan@prensa.com

Las empresas que promueven proyectos eólicos en Panamá se han visto afectadas por la crisis económica debido a que parte de la inversión la iban a aportar bancos internacionales cuyas acciones cayeron estrepitosamente.

Santa Fe Energy, uno de los proyectos más avanzados en el proceso, tenía firmado financiamiento con un banco europeo, cuya acción se desplomó de 54 a 6 euros.

Sin embargo, la empresa, que esperaba iniciar operación en 2009, ha buscado otros socios comerciales para echar adelante el proyecto y en estos momento solo está a la espera de la licencia definitiva de la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (Asep) para iniciar la construcción de la obra.

“Ya tenemos precios para los motores de los aerogeneradores y la construcción del proyecto completo”, aseguró Roberto Moreno, presidente de Santa Fe Energy, S.A.

Este proyecto, que se propone generar 81 megavatios, significa una inversión de 160 millones de dólares. De ese total, 25% es aporte de inversionistas locales e internacionales y el 75% restante corresponde a banca internacional.

Pero los ambientalistas también han lanzado su voz de alarma. Según los ecologistas locales, el área planteada para el proyecto está en el Parque Nacional Santa Fe, que “es muy frágil ecológicamente” y que, por tanto, sería contraproducente desarrollar un proyecto de energía limpia de esta categoría en esa área.

Para desarrollar un proyecto eólico, la empresa interesada debe demostrar que ha realizado pruebas de medición de la fuerza del viento en el campo por dos años consecutivos, además de tener los estudios de impacto ambiental aprobados.

La Asep informó que ha recibido nueve solicitudes de licencia para generación eólica, y que algunas de ellas han sido canceladas por no cumplir con los requisitos exigidos en el tiempo estipulado.

A dos empresas la Asep le adjudicó ya licencia para generación eólica.

Estas son la empresa Generadora Eólica del Caribe, S.A., para construir el proyecto Cerro Delgadito en Veraguas, con capacidad para generar 19.5 megavatios; y Southern Energy Wind, para el proyecto Alto de Piedra, también en Veraguas, que generaría 18 megavatios.

Entre las solicitudes de generación eólica que fueron canceladas aparecen Generadora Eléctrica de Panamá, para un proyecto en Los Santos; Parque Eólico El Copé en Coclé; Aerogeneradores Iberoamericanos, que hizo gestiones para cuatro proyectos, uno en Los Santos, uno en Colón, uno en la comarca Ngäbe Buglé y otro en Panamá; AES Panamá, S.A., que también había solicitado una licencia para un proyecto eólico en Gualaca, Chiriquí; y Enrilews, que pidió licencia para El Harino en Coclé.

Empresa eólica Enrilews iniciaría operaciones en el 2010

energía. varias empresas han solicitado permisos de operación.

Enrilews recibe licencia de la Asep para parque eólico

La filial de la española Fersa instalará 75 aerogeneradores en Toabré, distrito de Penonomé.

Se espera que el parque comience a generar energía en mayo de 2010, precisó la compañía.

Wilfredo Jordán Serrano
wjordan@prensa.com

Enrilews, una empresa filial del grupo español Fersa, recibió licencia definitiva de la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (Asep) para la construcción, explotación, mantenimiento, generación y venta de energía eólica.

El parque, con 75 aerogeneradores, estará situado en el corregimiento de Toabré, distrito de Penonomé, provincia de Coclé, con una capacidad total para generar 225 megavatios. Enrilews tenía una licencia provisional otorgada en 2007, hasta que completara el estudio de impacto ambiental y otros documentos exigidos para desarrollar el proyecto.

La primera fase incluye 40 aerogeneradores en Toabré, a una altura que varía entre 80 y 100 metros, similar al alto de un edificio de 13 pisos.

El 80% de la inversión será de la banca privada, confirmó el representante legal de Enrilews, José Iglesias. Enrilews es filial de Fersa, una empresa española que tiene cinco centrales en España y otras en Alemania, China e Italia.

“Queremos tener el parque en producción en mayo de 2010”, afirmó Iglesias.

En Panamá se construyen otros parques de generación, como Santa Fe Energy, que también se prepara para colocar los aerogeneradores en el área de Santiago de Veraguas.

En la Asep, varias empresas han solicitado licencia para desarrollar parques eólicos, pero muchas de ellas no han cumplido con el estudio de impacto ambiental y las mediciones de viento que se requieren.

Parque eólico sobre un bosque protegido

SANTA FE DE VERAGUAS.

Cuestionan proyecto de energía eólica

CORTESÍA/Sociedad Audubon
EN RIESGO. Vista del Parque Nacional Santa Fe.

José Arcia
jarcia@prensa.com

La construcción de un proyecto eólico en el Parque Nacional Santa Fe es la nueva preocupación de grupos ambientalistas, que afirman que será construido en un área protegida y en un lugar distinto al que se indica en el estudio de impacto ambiental aprobado por la Autoridad Nacional del Ambiente.

VERAGUAS. anam verificará información de estudio de impacto ambiental.

Malos vientos en reserva natural

Grupos ambientales cuestionan un proyecto eólico en el Parque Nacional Santa Fe.

El proyecto se desarrollaría en una zona distinta a la señalada en el estudio de impacto ambiental.

CORTESÍA/Sociedad Audubon
ÁREA PROTEGIDA. El Parque Nacional Santa Fe fue creado en 2001 y tiene 72 mil 636 hectáreas.

José Arcia
jarcia@prensa.com

Un proyecto eólico en el Parque Nacional Santa Fe, en la provincia de Veraguas, preocupa a los grupos ambientalistas.

Rosabel Miró, directora de la Sociedad Audubon de Panamá; y Raisa Banfield, directora del Centro de Incidencia Ambiental (Ciam), aseguraron que ambas organizaciones analizaron el estudio de impacto ambiental aprobado por la Autoridad Nacional del Ambiente (Anam) en julio de 2007, y encontraron “irregularidades”.

La primera está relacionada con la ubicación del proyecto, que desarrolla la empresa Santa Fe Energy.

De acuerdo con el estudio de impacto ambiental, se construirá en cerro Tute y cerro Delgadito, pero el mapa de ubicación que adjuntó la empresa en ese mismo estudio señala que el proyecto se desarrollará en el cerro Cabeza de Toro.

La Sociedad Audubon analizó los límites del Parque Nacional y determinó que los tres cerros están dentro, pero solo los dos primeros tienen áreas intervenidas por el ser humano.

La preocupación de los grupos ambientalistas radica en que, según el mapa, se está eligiendo al cerro Cabeza de Toro para desarrollar el proyecto, y esta es una zona boscosa.

De acuerdo con el estudio de impacto ambiental, la empresa necesita unos 25 kilómetros cuadrados para la infraestructura del parque eólico. Esto incluye, entre otras cosas, la construcción de una carretera que comunicará las 40 torres aerogeneradoras.

William Adsett, directivo de Audubon, también ha estudiado el tema y resalta que un estudio de 2003 del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo recomendó crear un parque eólico en cerro Tute, porque de ese lugar ya hay evaluaciones ambientales.

Para Adsett es inadmisible que se desarrollen proyectos energéticos en áreas protegidas y boscosas, y pidió realizar estudios ambientales correctos.

VERIFICARÁN ESTUDIO

El director de Evaluación de la Anam, Bolívar Zambrano, dijo que se inició una revisión del estudio de impacto ambiental, tomando en consideración lo planteado por Audubon y Ciam. Ambas partes se reunieron hace dos semanas.

Además, dijo Zambrano, se tiene programada una gira al área del proyecto, pues las inspecciones que se realizaron para la aprobación del estudio determinaron que eran áreas intervenidas. Ahora se busca corroborar la información que se presentó en el estudio de impacto ambiental y los planteamientos de los grupos ambientalistas.

Roberto Moreno, presidente de la empresa, negó por su parte que el proyecto se quiera desarrollar en el cerro Cabeza de Toro, y aclaró que se construye en las faldas del cerro Tute y cerro Delgadito.

Para el empresario, es probable que haya confusión sobre la ubicación, pero “estamos haciendo unos planos más detallados para aclarar las dudas”.

Según Moreno, el área de concesión entregada por la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos abarca 2 mil 780 hectáreas.

Además, el parque eólico está incluido en la lista de la Anam de proyectos que califican para recibir créditos de carbono, debido a que generaría “energía limpia”.

Para los grupos ambientalistas, sin embargo, un proyecto de energía limpia mal diseñado, terminaría siendo más dañino que uno contaminante.

Empresas eólicas llegan al país con el viento a favor

EnergÍa alternativa

Empresas eólicas llegan al país con el viento a favor

La ASEP anunció que dos empresas recibirán pronto el visto bueno para iniciar instalación
La energía eólica es considerada la mejor forma de generar energía limpia.
Tagnia Shocrón
tshocron@estrelladepanama.com

Una nueva alternativa energética en Panamá está próxima a ser una realidad. Dos empresas están a las puertas de incursionar en la energía eólica, aprovechando un recurso que se mantenía inexplorado en el país. Ellas son: Santa Fe Energy, S.A. y Energía y Servicio de Panamá (Esepsa), esta última, que pertenece al Grupo Unión FENOSA está finalizando los procesos de permiso para operar, información que fue confirmada por la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP).

Esepsa, con una inversión de 100 millones de dólares tienen proyectado generar 50MW.

La planta eólica denominada «Parque Eólico Hornitos» estará ubicada en el corregimiento de Hornitos de la provincia de Chiriquí.
El 80% de la energía se produciría en período de verano, cuando hay mayor actividad de los vientos.

Una ventaja que resalta Esepsa es que se dependerá de menor proporción de las termoeléctricas durante el período de sequía.
Actualmente, la filial de Unión FENOSA adelanta la tramitación para el suministro de los equipos técnicos «aerogeneradores» más adecuados a las condiciones de viento existentes en el área. Según la empresa, a nivel mundial existe una gran demanda de dichos equipos.

Pero no es la primera vez que la distribuidora juega doble papel en el mercado energético, ya que opera microhidroeléctricas y termoeléctricas en varios puntos del país.

Unión Fenosa, como distribuidora tiene permitido participar en la generación hasta el 15% de la energía que distribuye, aclaró el administrador general de la ASEP, Víctor Urrutia.

La otra compañía con una inversión más alta, también explorará las ventajas topográficas de Panamá. Santa Fe Energy, de capital mixto con inversionistas nacionales, estadounidense y europeo tiene proyectado una inversión por 240 millones de dólares y agregará al sistema eléctrico 160 MW.

Se instalarán aproximadamente 80 torres que medirán entre 60 y 80 metros de altura en las áreas de Cerro Tute, Cabeza de Toro y en área cercana a Santa Fe.

La empresa espera iniciar los trabajos en el mes de octubre y finalizará a los 12 meses.

Para que la energía eólica sea rentable, es necesario que el viento tenga al menos una velocidad de 3 metros por segundo.
En el sector de Santa Fe hay brisa todo el año a una velocidad promedio de 5 metros por segundo.

En la fase de construcción se empleará alrededor de 400 personas y cuando finalice la obra necesitarán 50 empleados permanentes.

La obra será financiada por el banco francés Sociéte Générale Corporate & Investment Banking Socgen, aunque no han entrado en negociaciones con las empresas distribuidoras.

El presidente de la empresa, Roberto Moreno alega que esta generación es limpia y será más económica que las termoeléctricas, aunque no definió cuánto; el precio las comparó con las hidroeléctricas.

Otro aporte, anunció Moreno, es que los moradores del área se beneficiarán con créditos de carbonos por el monto de 1.5 millones de dólares.
El presidente de la Unión Nacional de Consumidores y Usuarios de Panamá (Uncurepa), Pedro Acosta, afirma su apoyo a la búsqueda de energía alternativa que aminore el alto costo de la energía que pagan los consumidores.

Sin embargo, hace la salvedad que «no se utilice como excusa la nueva tecnología para aumentar la tarifa».

Para el dirigente, el principal problema es la especulación y la distorsión en el mercado, que solo se resolverá con la revisión de las concesiones y contratos.