Reconocen importancia estratégica de humedales San San Pond Sak y Bahía de Panamá

Misión Ramsar reconoce importancia estratégica de San San Pond Sak y Bahía de Panamá

Panamá, Burica Press (27 de noviembre de 2008). La especialista en humedales, Monserrat Carbonell de la misión científica de Ramsar en Panamá ha indicado que su objetivo en Panamá durante esta semana es la de evaluar a nivel macro e integral la sostenibilidad de los dos sitios Ramsar de Panamá que han sido identificados en peligro, donde observarán aspectos del manejo que requieren, con tal de dar especial atención y propuestas de acciones a la Secretaria Mundial de Sitios Ramsar. Los dos sitios Ramsar que están en la mira científica de esta misión son el Humedal de San San Pond Sak en Bocas del Toro y la parte alta de la Bahía de Panamá en el extremo este de la ciudad de Panamá.

La Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM) ha indicado que desconoce los impactos al Humedal de San San Pond Sak por los proyectos hidroeléctricos propuestos y tampoco conoce el nivel de daño que están causando las urbanizaciones en los Manglares que son parte del Sitio Ramsar Bahía de Panamá.

La misión quiere ayudar a iniciar procesos que aseguren la conservación de los caracteres ecológicos de los sitios Ramsar amenazados de Panamá.

Humedal de San San Pond, alimentado por las aguas del Rio Changuinola en Bocas del Toro

Humedal de San San Pond Sak, alimentado por las aguas del Río Changuinola en Bocas del Toro, Panamá. Foto: A. Rodríguez

La única conclusión que tienen hasta el momento de la visita, antes de la conclusiones finales es que han determinado que efectivamente los dos humedales en cuestión son muy importantes a nivel hemisférico y del mundo. Las presiones que tienen estos sitios deben ser manejados con acciones de manejo que no pueden esperar y es prioritario involucrar o ampliar los actores sociales en el manejo de dichas áreas. La Autoridad no debe trabajar sola en el manejo de sitio y debe incluir a todas los actores aunque tengan diferencias de criterios, argumentó la bióloga Carbonell, experta líder en humedales de la Misión Ramsar.

La Bahía de Panamá desde el sector de Panamá Viejo hasta Bayano es considerada un sitio Ramsar fundamental como sitio de alimentación y descanso de millones de aves migratorias que arriban cada otoño al país en dirección a Suramérica. El fangal de las costas alimentado por la materia orgánica que proveen los manglares del sector es la base fundamental de la pirámide ecológica que permite albergar tan numerosa cantidad de aves migratorias cada año. Este sitio Ramsar está amenazado por rellenos y urbanizaciones que están destruyendo manglares y están produciendo cambios en el régimen de agua dulce de los humedales de tierra firme que se entrelazan con el manglar de la zona.

San San Pond Sak, localizado en la desembocadura del Río Changuinola en Bocas del Toro también está amenazado desde diferentes frentes, ya sea por la contaminación por plaguicidas, mal manejo y administración del área y por los planes de construcción de varias hidroeléctricas en la cuenca de este río, que según los ecologistas estas infraestructuras cambiarían el régimen hídrico o el balance requerido necesario para no afectar la integridad ecológica del sitio.

Convención Ramsar manifiesta inquietud por San San Pond Sak y Bahía de Panamá

Convención Ramsar manifiesta inquietud

Montserrat Carbonell (izq.) y María Rivera. LA PRENSA/ Eric Bartista

JOSÉ ARCIA
jarcia@prensa.com

Las voces de advertencia por los manglares de Juan Díaz no acaban. Representantes de la Convención Ramsar estuvieron en Panamá para analizar ese ecosistema, que ha sido declarado como sitio Ramsar por su importancia ecológica para las aves migratorias.

María Rivera, consejera principal para América de la Convención Ramsar, con sede en Suiza, y Montserrat Carbonell, consultora de la convención, visitaron y sobrevolaron los humedales y manglares de la bahía de Panamá para analizar sus condiciones.

También visitaron los humedales de San San Pond Sak, en la provincia de Bocas del Toro, otro de los sitios Ramsar en el país –a estos se suman Punta Patiño, en Darién, y el golfo de Montijo, en Veraguas–.

Por los dos humedales visitados manifestaron preocupación, debido a la expansión del desarrollo urbano.

Es urgente que las autoridades asuman medidas de conservación, dijo Carbonell. En el caso de los humedales y manglares de Juan Díaz, añadió, es evidente la expansión de la ciudad capital, que seguirá ejerciendo presión sobre la zona.

Para Carbonell, las autoridades tienen que hacer los esfuerzos para conservar estos ecosistemas.

Rivera explicó que el objetivo de la visita al país es recopilar la mayor cantidad de información para hacer un análisis más profundo sobre las condiciones ecológicas de los sitios y emitir sus recomendaciones.

Ayer se hizo un foro sobre el tema, en el que participaron grupos ambientales y entidades del Gobierno.

Aleida Zalazar, directora de Áreas Protegidas de la Autoridad Nacional del Ambiente, dijo que en el caso de los manglares de Juan Díaz se adelanta un proyecto para declarar el sitio como área protegida, que abarcará casi toda la zona costera de la bahía de Panamá.

Comunicado sobre conflicto ambiental en Reserva de la Biosfera, Panamá

COMUNICADO A LA NACIÓN PANAMEÑA

ANAM RESPONSABLE DE CONFLICTO AMBIENTAL EN EL RÍO CHANGUINOLA POR PERDER SU BALANCE COMO AUTORIDAD RECTORA Y SE HA CONVERTIDO EN ENTIDAD AUSPICIADORA DE PROYECTO HIDROELÉCTRICOS EN ÁREAS PROTEGIDAS CON POBLACIONES INDÍGENAS

Estimados conciudadanos panameños:

La Alianza para la Conservacion y el Desarrollo (ACD), la Asociación de Derecho Ambiental (ADA) y la Asociación Ecologista Panameña (ASEP) denuncian que la Administradora General de la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM), Ligia Castro, y el Sub-Administrador Eduardo Reyes, son los principales responsables del conflicto ambiental que se está dando entre los indígenas del Río Changuinola y la empresa AES Changuinola, que promueve la construcción del proyecto hidroeléctrico Chan 75 dentro del Bosque Protector Palo Seco (BPPS), en la Reserva de la Biosfera de La Amistad. Como expresamos desde abril de 2005, la ANAM nunca debió aprobar el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Chan 75 sin que se hubieran realizado los inventarios biológicos, prospecciones arqueológicas y estudios socio-económicos que eran requeridos por la ley 41 General de Ambiente de 1998. Dos años más tarde, y a pesar de existir un proceso administrativo por incumplimiento del EIA, así como una petición internacional a la UNESCO para declarar al Parque Internacional La Amistad (PILA) como Sitio de Patrimonio Mundial en Peligro, la ANAM también le otorgó una millonaria concesión administrativa de 6,215 hectáreas del Bosque Protector Palo Seco (BPPS) a AES Changuinola, desconociendo de esta manera los derechos legales y la oposición expresada por la población indígena de las áreas anexas de la Comarca Indígena Ngobe-Bugle.

Desde inicios del presente año, moradores de las comunidades de Nance de Riscó, Lazo de Santa Fe, Charco de La Pava, Valle Rey, Guayabal, Changuinola Arriba y Valle de Risco han denunciado en numerosas ocasiones, y de manera verbal y escrita, los abusos y atropellos de los que han sido víctimas por parte de oficiales de la empresa AES. Las autoridades de la ANAM han hecho caso omiso de todas estas quejas, y se han inclinado peligrosamente en defender las actuaciones de la empresa, revelando así una evidente parcialidad y negligencia impropia de una autoridad rectora. La ANAM no sólo ha fallado en resolver el proceso de investigación administrativa que se inició en febrero pasado, sino que tampoco le ha dado respuesta a la carta enviada el mes pasado por los moradores del Río Changuinola solicitando la suspensión del proyecto Chan 75 por incumplimiento del EIA.

Durante los últimos acontecimientos, las comunidades se han opuesto a que se inicien las detonaciones en el sitio de presa, localizado al otro lado del río de la comunidad Ngobe de Charco de La Pava, y que fuera la morada de la anciana viuda Isabel Becker antes de ser desalojada de manera abusiva en el mes de octubre. Hay que aclarar que este lugar fue identificado como un sitio de importancia arqueológica por los dos estudios que se realizaron después de la aprobación del EIA; y que AES Changuinola no tiene los permisos requeridos por la Dirección Nacional de Patrimonio Histórico del INAC para la realización de excavaciones y mucho menos para hacer explosiones que destruirían para siempre el legado cultural de todos los panameños.

Lamentamos mucho que AES Changuinola, al igual que su contratista europeo Changuinola Civil Works (CCW), no hayan respetado las fiestas de fin de año y que hayan sembrado la inquietud y el desasosiego entre las comunidades indígenas durante estos días que debieran estar caracterizados por la comprensión y la armonía. En este sentido, urgimos a las autoridades de la ANAM y a la Defensoria del Pueblo a que prevengan el uso de la fuerza por las autoridades locales en el área protegida, y a que visiten el área del conflicto esta misma semana. No quisiéramos pensar que la reciente declaración de los proyectos del Río Changuinola como de interés social y público por parte de la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP) debiera interpretarse como una carta blanca para que las empresas ignoren las leyes ambientales y de protección del patrimonio cultural, y para despojar de sus derechos a las comunidades Ngobe de la Reserva de la Biósfera de La Amistad.

Las asociaciones arriba suscritas solicitamos que todos los ciudadanos solicitemos con vehemencia y responsabilidad que en Panamá se haga valer las leyes ambientales existentes en el país para que impere la justicia y el respeto que todos nos merecemos, especialmente hoy que están en juego las áreas protegidas de la Reserva de la Biósfera La Amistad Panamá por proyectos hidroeléctricos, especialmente el Parque Internacional La Amistad, el Bosque Protector de Palo Seco y el Humedal de San San Pond Sak

Panamá, 22 de diciembre de 2007.

 

Reserva de la Biosfera La Amistad Panamá desde el Bosque Protector de Palo Seco

Foto: BD Panamá. Vista parcial de la Reserva de la Biósfera desde el Bosque Protector de Palo Seco. Al fondo se observa la parte más alta de la Reserva: la cima de Volcán Barú.

Reserva de la Biósfera La Amistad Panamá desde Carenero y Changuinola

Reserva de la Biosfera La Amistad desde el Archipielago de Bocas del Toro, al fondo el Volcán Barú

La Reserva de la Biosfera La Amistad Panamá, incluye ecosistemas de agua dulce de San San Pond Sak, ecosistemas marinos, arrecifes, bosques, islas y selvas de diferentes niveles altitudinales hasta 3,475 msnm en el Volcán Barú del Lado Pacífico. El 95% de la Reserva está en el Caribe del Bocas del Toro y la Comarca Ngobe Bugl, el 5% se encuentra en la Provincia de Chiriquí.

San San Pond Sak, desembocadura del R�o Changuinola

Humedales de San San cerca de la desembocadura del Río Changuinola, Bocas del Toro

Fotos: Cortesía de Prof. Ariel Rodríguez, Universidad de Panamá